El Grupo de Trabajo de Envejecimiento del Colegio Oficial de Psicólogos de la Región de Murcia ha remarcado su esfuerzo en mejorar la calidad de vida tanto de los enfermos de alzhéimer como de los cuidadores, que son un «pilar fundamental» en su atención y que pueden sufrir el síndrome de cuidador quemado o 'burnout' si no están cubiertas sus necesidades de apoyo y asesoramiento, destaca la psicóloga colegiada Aída Cano Esparza.

La psicóloga hizo estas declaraciones con motivo del Día Mundial de la enfermedad de Alzheimer que se celebra hoy y con la intención de hacer llegar a toda la sociedad las necesidades de este colectivo.

Los profesionales de la Psicología destacan la importancia del tratamiento no farmacológico, ya que va a influir de forma determinante «en su bienestar y en el bienestar de los que están a su alrededor, sobre todo de su cuidador principal». Y es que «es muy relevante que los familiares tengan un referente al que poder acudir», según se remarca desde el Grupo de Trabajo, que se pregunta si todo el mundo está preparado para cuidar a una persona con Alzheimer.

Para lograr el equilibrio entre su cuidado y el cuidado del familiar, los profesionales, desde centros de día, residencias y hospitales cumplen una gran labor, si bien «se encuentran con falta de recursos».

Por otra parte, un 10% de las personas que están diagnosticadas de Alzheimer se beneficiaría de una valoración multidisciplinar que 'destapara' otro tipo de enfermedades con pronóstico muy diferente, como la hidrocefalia crónica del adulto, para la que sí existe un tratamiento eficaz y que a veces se presenta asociada al Alzheimer, según apuntan desde el Hospital Quirónsalud de Murcia.