El Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia (TSJ) ha confirmado la sentencia que declaró improcedente el despido de un estudiante universitario que sufrió graves lesiones al accidentarse cuando circulaba con un coche eléctrico con el que hacía las prácticas de su carrera.

La sentencia desestima así el recurso que la empresa C.E., S.L. presentó contra la resolución del Juzgado de lo Social de Murcia que la condenó a su readmisión o a pagarle una indemnización por despido de 496 euros.

El Juzgado, en la sentencia que ahora encuentra el respaldo del TSJ, declaró probado que el accidentado, alumno de la Universidad de Alicante, realizó unas prácticas en la citada empresa en el año 2013, acogiéndose al convenio firmado entre la misma y la institución universitaria.

El accidente de tráfico que le ocasionó lesiones graves, que tardaron en curar más de un año, se produjo -en circunstancias que no se recogen en la sentencia del TSJ- el 18 de febrero de 2014, cuando circulaba como conductor de un vehículo eléctrico propiedad de la empresa por una calle de la pedanía murciana de Beniaján.

Posteriormente, el estudiante demandó por despido improcedente a la empresa, a lo que hoy se le da la razón, pero la empresa negó en todo momento que existiera entre ambos una relación laboral, y declaró que el joven iba a las instalaciones libremente para finalizar su trabajo de fin de grado.