La consejería de Sanidad ha realizado durante el verano un total de 353 inspecciones a 288 establecimientos, y se han tomado 116 muestras de agua para análisis a fin de prevenir la aparición de legionelosis. Esta enfermedad, causada por la bacteria legionela, tiene su mayor fuente de contagio en los sistemas de aguas de grandes edificios, hoteles y hospitales, aires acondicionados, humidificadoras, máquinas de rocío y fuentes de agua termal. Así, durante el verano, el programa de prevención incide en instalaciones como torres de refrigeración y condensadores evaporativos, pulverizadores de agua en terrazas y sistemas de agua de establecimientos como hoteles, campamentos de turismo y piscinas.