El empresario Juan Ortín, propietario de la empresa subcontratada para realizar las obras del tramo del AVE comprendido entre Crevillente (Alicante) y Murcia, consiguió que, pese a estar en la Central de Riesgos (CIRBE), el Banco de Valencia le concediera una línea de crédito por un millón de euros. Esta información aparece en las actas de las declaraciones efectuadas a la Guardia Civil por los que eran interventor y director de la oficina de la citada entidad bancaria en Santomera, que declararon dentro de las investigaciones abiertas por un presunto fraude en dichas obras que podría superar los 17 millones.
En su declaración el que fuera interventor del banco, A.G., que declaró como testigo, afirmó que conocía la empresa y al propio Ortín, empresario que fue captado por la entidad bancaria tras conocerse que trabajaba con sociedades que desarrollaban obras del AVE, como la creada por Sacyr.
