La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia ha respaldado la sentencia de un juzgado que declaró procedente el despido del empleado de un taller por la crisis económica por la que atravesaba la empresa.

La sentencia del juzgado de lo social declaró probado que según las declaraciones del impuesto de sociedades la cifra de negocios de la empresa había bajado de 156.000 euros en 2010 a 104.790 euros en 2013.

Los jueces coinciden en que la situación económica de la demandada justificaba el despido.

Al desestimar el recurso del demandante, la sala confirma la sentencia de instancia, que declaró convalidada la extinción del contrato de trabajo y condenó a la demandada al pago de 1.900 euros por la paga extraordinaria de julio de 2014 y por la falta de preaviso del despido.