Podemos, PSOE y Ciudadanos aprobaron ayer una moción parlamentaria que exige a la Comunidad una solución política para la «delicada situación financiera» en la que se encuentran los regantes del Heredamiento de Molina y levantar el embargo de los bienes para que puedan continuar con sus cosechas, de las que viven más de 4.000 familias de las huertas de Molina, Lorquí y Algaida.

El único grupo que votó en contra ha sido el PP «para no instar al Gobierno a cometer una ilegalidad», dijo el diputado Jesús Cano.

Según recordó la diputada de Podemos, María Giménez, la polémica surge a raíz del Plan de Modernización de Regadíos, que empezó en 1997. La Comunidad dio ayudas a la junta directiva anterior para poner en marcha obras, pero no se llevaron a cabo y ahora exige la devolución de dos millones de euros, por lo que, al no pagar, se han embargado los bienes y las cuentas bancarias, con 80.000 euros.

Un juez ha dado la posibilidad de presentar un aval para levantar el embargo, aunque los regantes afirmaron que no pueden hacer frente al pago. El PP reiteró que otras comunidades de regantes aportarían el dinero a cambio de la venta de agua, aunque el Heredamiento sostiene que la CHS no se lo permite al no haber un control sobre el excedente de la comunidad.

Ayer, la Asamblea exigió al Gobierno una solución inmediata.