­La cuenca del Segura va a seguir oficialmente en sequía un año más, y aunque el ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ha iniciado los trámites para prorrogar hasta el 30 de septiembre de 2017 el Real Decreto, no ha incluído ninguna medida concreta para incrementar los recursos ya.

Un guiño a los regantes que cae en saco roto si no va acompañado de las medidas que llevan reclamando para conseguir agua para regar en estos momentos los cultivos hortícolas y el arbolado y poder empezar a plantar los de la campaña otoño-invierno.

Una de las demandas es que se desbloquee la cesión de los 25 hm3 de agua -30 en un principio- de la cuenca del Segura para los regantes del Trasvase Tajo-Segura y que se acordó hace meses. Aún se está negociando entre el Ministerio y los regantes, ya que el departamento de Isabel García Tejerina, decidió hace pocas semanas reclamar un aval de más de 10 millones de euros antes de cederla, pese a que en el acuerdo se habló de devolver «agua con agua».

También piden que se reabran la batería de pozos estratégicos de la cuenca y que se agilicen las cesiones de derecho de aguas sobrantes entre las comunidades de regantes.

Todas estas demandas, hasta ahora no atendidas, provocaron una nutrida concentración de agricultores el pasado viernes, 24 de junio, a las puertas de la Confederación Hidrográfica del Segura, el organismo que gestiona el agua de la cuenca.

Medidas excepcionales

La prórroga de la declaración de sequía en la demarcación hidrográfica del Segura tendrá que ser aprobada por Real Decreto, y «permitirá al Gobierno de España poder seguir aplicando durante la próxima campaña de riego medidas excepcionales para paliar los efectos» de la falta de recursos hídricos, según explica el Ministerio en un comunicado.

La ausencia de cambios significativos hace necesario, sigue el departamento que dirige, aun en funciones, Isabel García Tejerina, ampliar la duración de los Reales Decretos de sequía aprobados en mayo de 2015.

El Ministerio recuerda que las medidas adoptadas hasta el momento han permitido poner a disposición de los usuarios unos 154 hm3 en la cuenca del Segura. Estos recursos se han obtenido de la apertura de los pozos del Sinclinal de Calasparra, de la batería estratégica de la cuenca de la utilización de volúmenes laminados en episodios de lluvia, y el uso de recursos de desalinización de agua de mar no asignados y pozos de sequía.

La falta de precipitaciones en este último año en la cuenca del Segura ha provocado un descenso tanto en la aportación a los embalses de cabecera como en el volumen que éstos almacenan, encontrándose el indicador del estado global de la cuenca (el que aglutina los subsistemas cuenca y trasvase) «en una situación de prealerta, con tendencia desfavorable», añade.