«¡Descontaminación ya!», se podía leer en la pancarta que activistas desplegaban ayer en Portmán (La Unión), para volver a exigir actuaciones contundentes por parte de la Administración para lograr recuperar la zona.

En concreto, los ecologistas estuvieron en una zona de antiguas balsas de pirita. Vestían monos protectores y llevaban mascarillas, para escenificar que «el polvo es tóxico», explicó Pedro Luengo, portavoz de Ecologistas en Acción. Luengo insistió en que «la legislación de suelos contaminados sigue sin resolverse».

Subrayó que la contaminación del lugar «es perjudicial para la salud de las personas que viven en el entorno», ya que existe «un polvo cancerígeno».

En la acción estuvieron miembros de Anse, Ecologistas en Acción, Grupo Ecologista del Mediterráneo, la Liga de Vecinos de Portmán y Salvemos Calblanque.

«Con esta acción de protesta realizada en las balsas donde se ha producido la oxidación y transformado los restos de concentrados de pirita, quedando biodisponibles algunos materiales peligrosos, los colectivos sociales, vecinales y ecologistas quieren denunciar esta situación de riesgo para la salud de las poblaciones próximas a estas zonas con restos de actividades mineras, y exigir a la Administración Regional, al presidente Pedro Antonio Sánchez y a todos los responsables en temas de salud y de medio ambiente, la urgente declaración de estos suelos contaminados y la elaboración de un plan de actuación para la eliminación y mitigación de los riesgos para la salud de las personas y del medio ambiente que conllevan», expresaron luego los ecologistas, en un comunicado de prensa conjunto.