El fabricante de coches eléctricos Tesla Motors quiere instalar en la Región un punto de carga rápida para los vehículos alimentados con energía eléctrica que produce. El gigante norteamericano estudia en este momento la ubicación de su primer enchufe al que podrán conectarse los turismos que utilizan energía limpia, no solo los de su marca. La compañía mantiene contactos con la consejería de Desarrollo Económico, Turismo y Empleo para agilizar sus planes, que pasan por la creación de una red de supercargadores en toda España. El primero se instaló en Gerona en 2015 y su pretensión es continuar su expansión por el Corredor Mediterráneo. Proyecta también una planta en Europa para fabricar su nuevo modelo Tesla 3, que saldrá en 2017, por lo que pretende crear previamente una red de puntos de carga rápida.
En la Región hay 669 vehículos eléctricos, que representan el 5% del parque nacional, constituidos por 13.620, según los datos de la Consejería. En el último año las ventas de coches eléctricos han aumentado un 160%, de acuerdo con las cifras de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac).
La decisión del gigante estadounidense de empezar a instalar en la Región puntos de carga forma parte de su estrategia de expansión en Europa, donde tiene previsto construir una nueva factoría para producir sus coches eléctricos.
Tesla es una compañía surgida en el Silicon Valley, cuya capacidad de producción se ha visto desbordada por la demanda que están teniendo en el mercado sus modelos. En 2017 pretende sacar a la venta el Tesla 3, cuyo precio se situará en torno a los 31.000 euros.
La empresa tiene su centro de operaciones en Fremont, California, y está liderada por el emprendedor sudafricano Elon Musk, que busca sede en Europa para disponer de una capacidad de producción acorde con el crecimiento previsto en los próximos años. Musk presentó el pasado mes de abril el modelo Tesla Model 3, que quiere convertir en el primer eléctrico de consumo de masas del mundo.
En todo el continente únicamente cuenta con un punto de ensamblaje en Holanda, en Tilburg, puesto en marcha hace seis meses para la última fase de montaje con el fin de reducir así el tiempo de espera, pero va a necesitar más instalaciones.
El mero anuncio del nuevo vehículo ha desatado un fenómeno en Estados Unidos. En las primeras 36 horas la compañía acumuló unos encargos de unas 400.000 unidades.
En España se ha ofrecido como sede la Comunidad Valenciana, que pone a disposición del fabricante norteamericano suelo en el municipio de Paterna, pero también Francia y Reino Unido aspiran a llevarse la sede europea del fabricante.
El problema de Tesla, y del coche eléctrico en general, es la red de cargadores. El modelo que saldrá en 2017 da un salto en ese sentido, con una autonomía de 350 kilómetros. La compañía está instalando 'supercargadores' en todo el Arco Mediterráneo. Empezó en julio pasado en Gerona, continuó en Tarragona, y pronto montará una instalación en el parque tecnológico de Paterna.
La próxima será precisamente la de la Región, una vez que esté decidido su emplazamiento.
Junto con la red de puntos de carga, Tesla se propone ampliar también su estructura de ventas.
La escasa presencia de Tesla en España contrasta con la amplia red de cargadores de Centroeuropa, los países del norte y Reino Unido.
