Aurelio Soto Suárez, que hoy estará en Murcia, es teniente de navío de la Armada Española. Licenciado en periodismo y Master en Relaciones Internacionales y Comunicación, es especialista en comunicación de la Defensa y Emergencias. Actualmente está destinado en la Oficina de Comunicación Pública de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y es el responsable de sus redes. La UME la primera unidad de intervención de las Fuerzas Armadas ante emergencias de grandes proporciones, como terremotos, inundaciones y tormentas.

Participa en Murcia en una jornada sobre la gestión de las emergencias en redes sociales, ¿cómo afecta este nuevo escenario a su trabajo?

Aunque a priori podría parecer un problema, lo cierto es que las redes sociales son una oportunidad para mejorar la actuación ante las emergencias, sobre todo desde el punto de vista de la comunicación. Tienen unas características que las hacen muy valiosas para gestionar la información de utilidad con rapidez. Por ejemplo, a través de las redes sociales, podemos ofrecer datos necesarios a la población afectada por una emergencia, difundir reglas de autoprotección, publicar mapas con información, incluso para geolocalizar a personas.

Los bulos e informaciones falsas siempre han existido, pero las redes sociales ayudan a su propagación. ¿Cómo manejan estos casos para evitar situaciones de alarma en la población?

Los bulos y las informaciones falsas pretenden llenar el vacío de información; por ello, tal y como reconoce la Organización Panamericana de la Salud, la mejor manera de controlar la información es ofrecerla. Esta es la regla general que seguimos los servicios de emergencias responsables en cada caso, pero también es cierto que esa información tiene que ser comprobada. La inmediatez de las redes sociales supone un reto para los servicios de emergencia pero no debemos caer en la precipitación. Por ello, la comprensión y colaboración ciudadana es fundamental para evitar la difusión de las informaciones falsas que, involuntaria o deliberada, pueden perjudicar a la gestión de la propia emergencia. La norma fundamental para evitar los bulos es seguir a las cuentas oficiales y no contribuir a la difusión de la información supuesta o no contrastada.

Ha sido uno de los 45 militares que ha viajado a Ecuador, junto con 12 bomberos de la Comunidad de Madrid, para ayudar en las labores de búsqueda y rescate del terremoto...

Nuestra función principal ha sido la colaboración en la búsqueda y rescate. Para ello contamos con equipos cinológicos, estos son perros especialmente preparados para la detección de cuerpos bajo los escombros, y equipos de búsqueda técnica con la ayuda de geófonos, cámaras periscópicas y drones. Nuestra zona de trabajo se ha centrado en la provincia de Malabí, concretamente en los municipios de Manta, Canoa, Chone y Bahía de Caraquez. Allí, además de trabajar en las labores de búsqueda y rescate, hemos colaborado en la recuperación de material hospitalario de especial necesidad en estos momentos y en la protección del patrimonio histórico.

La actuación de la Unidad Militar de Emergencias en el terremoto de Lorca le valió la Medalla de Oro...

El trabajo fue intenso y duradero, pero lo que más recordamos no es el esfuerzo o los meses allí dedicados, sino el aprecio y reconocimiento de Lorca y de Murcia en general. En el centro de nuestra Sala Histórica se encuentra tanto la Medalla de Oro de la ciudad de Lorca como la bandera de España que ondeaba el día del terremoto en el Ayuntamiento. Ojalá hayamos podido darle a Lorca tanto como sus gentes nos han dado a nosotros.