La Confederación Española de Padres y Madres de Alumnos (Ceapa), mayoritaria en la enseñanza pública, ha aconsejado a las familias que están en contra de la evaluación final de Primaria de la Lomce que no lleven a sus hijos al colegio los días en que se hagan las pruebas para evitar que sean examinados. Lo mismo propone con la evaluación de tercero de Primaria. En la Región, la FAPA Juan González, federación miembro de Ceapa, respalda «plenamente» esta medida, según explicó ayer a esta Redacción su presidenta, Francisca López, quien destacó que «no lo hemos manifestado de forma pública, ya que en Murcia la consejería de Educación ha programado varios días para la realización de las pruebas, por lo que para las familias será difícil no llevar a sus hijos al colegio durante tantos días».

Ante esto, el ministerio de Educación ha advertido que negarse a realizar la evaluación final de Primaria «priva a la Administración educativa de una información relevante para detectar los problemas y aportar recursos adicionales allí donde se necesiten». Esta medida fue anunciada ayer, coincidiendo con la información ofrecida por la consejera de Educación, María Isabel Sánchez-Mora, sobre las pruebas de diagnóstico, que comenzarán la próxima semana y serán realizadas por más de 53.000 alumnos de la Región para «la mejora del sistema educativo». La evaluación individualizada de tercero de Primaria la harán 18.500 alumnos en 500 centros de la Región e intervendrán 855 profesores.

Según explicó la consejera, mediante tres exámenes se evaluarán las competencias en Matemáticas y en comunicación lingüística en inglés y en castellano, con la finalidad de ofrecer un informe individualizado a los alumnos sobre el progreso en la adquisición de competencias. La prueba tendrá lugar del 10 al 12 mayo. Asimismo, la prueba final de etapa de sexto de Primaria la llevarán a cabo 17.000 alumnos de 485 centros educativos e intervendrán 815 profesores externos. Los exámenes, que se efectuarán del 16 al 19 de mayo, serán a razón de una competencia cada día (Lengua, Inglés, Matemáticas y Ciencia y Tecnología).

Las pruebas abarcarán cuatro tipos de preguntas: de respuesta cerrada (tipo test), de respuesta semi-construida, de respuesta construida y de respuesta abierta (desarrollo). La mayoría de las preguntas serán de tipo test. Por último, la prueba de diagnóstico de segundo de Educación Secundaria se lleva a cabo con el objetivo de «comprobar el grado de adquisición de las competencias lingüísticas de Inglés y Castellano. La practicarán 17.800 estudiantes de 220 centros y participarán 700 profesores externos.

La consejera resaltó que «las pruebas han sido diseñadas por 45 profesores de colegios e institutos de la Región y comprenden preguntas habituales sobre conocimientos aprendidos durante el curso». Además, aseguró que «no tienen efecto académico ni reflejo alguno en los expedientes», así como que «no se trata de una reválida». Preguntada por si los resultados de cada una de las pruebas se harán públicos, María Isabel Sánchez-Mora destacó que la próxima semana tendrá lugar una reunión con el ministro de Educación con todos los consejeros y «entonces sabremos lo que se hará». Aun así, manifestó que «existe una Ley de Transparencia por la que, si alguien pregunta por unos datos, ya sean educativos o de otra área, deben tener acceso a esa información». La Región comenzará las pruebas la próxima semana, junto a Madrid, Galicia, Castilla y León, La Rioja, Ceuta y Melilla. Según la consejera, «se hacen pruebas de este tipo en todas partes, pero les llaman de otro modo». En cuanto a las comunidades que no tienen previsto llevarlas a cabo, Sánchez-Mora explicó que «deberán hacerlas o declararse insumisas, porque así lo establece la ley, por lo que de una manera u otra terminarán haciéndolas».

«Anacrónica e inútil»

La diputada regional Choni Ludeña pidió ayer a la consejera de Educación que confíe en los profesionales docentes, que «son los que conocen a los alumnos» y que deje de «someter al alumnado a unas pruebas que no sirven para nada».

Ludeña aseguró que «los niños y niñas de Primaria y Secundaria se van a enfrentar a una prueba de evaluación anacrónica e inútil». Ha solicitado a la consejera que aplique lo que se aprobó a principio de curso en la Asamblea Regional, recordando que en las comunidades en las que gobierna el PSOE, el personal docente se ha comprometido a elaborar para cada estudiante el informe valorativo del nivel de dominio alcanzado en cada una de las competencias que son objeto de evaluación».