En su primera sesión de control parlamentario desde que es presidente de la Comunidad, Pedro Antonio Sánchez respondió a las preguntas de los portavoces de la oposición con un tono mucho menos crispado del que empleaba su antecesor y presidente de su partido, Ramón Luis Valcárcel, en estas sesiones. A las puertas de una nueva campaña electoral, PAS evitó la gresca (solo tuvo un pequeño rifirrafe con el portavoz de Podemos, a quien llamó «manipulador») y se centró en defender la gestión que está realizando su Gobierno, sobre todo en el aspecto económico.

El jefe del Ejecutivo dio por finalizada la crisis en la Región al asegurar que el PIB regional de este año será similar al que había en 2007 (27.989 millones), antes de que se iniciara esta etapa de recesión económica. Esto hará posible, según afirmó el presidente en la Cámara autonómica, que el Gobierno pueda cumplir sus expectativas para esta legislatura, en la que pretende «reducir la tasa de paro hasta el 15%, alcanzar la cifra de 620.000 ocupados y conseguir que el 35% de la población murciana sea cualificada».

Pedro Antonio Sánchez comenzó su intervención hablando del AVE, defendiendo el acuerdo que firmó en septiembre con Ciudadanos para cambiar las fases del soterramiento. Y es precisamente ese pacto el que retrasará la llegada de la Alta Velocidad, y no las obras del colector en la zona sur de Murcia. «Hemos sacrificado los plazos previstos en aras del consenso social», indicó el presidente de la Comunidad, quien confirmó que el AVE llegará a la estación del Carmen de Murcia y no a Beniel, como se había venido rumoreando en las últimas semanas. Si se retrasa la Alta Velocidad no es por el colector que hay que sortear, según Sánchez, sino porque se va a ampliar el soterramiento en más de 700 metros, suprimiendo el paso a nivel de Los Garres, como exigían los vecinos.

Más duro estuvo con Óscar Urralburu, portavoz de Podemos, quien previamente le había recordado los casos de corrupción del PP, entre ellos el caso Auditorio, que afecta al presidente. Le reprochó que cambiara sobre la marcha la pregunta que le planteó e ironizó con el nombre de su partido, al que llamó «Posemos» en lugar de Podemos. Afirmó que mantiene el compromiso de investidura de suprimir los aforamientos, pero dentro de una reforma global del Estatuto de Autonomía. «Si de verdad quiere hacer un nuevo Estatuto, escuche al otro lado de la pancarta, escuche a la sociedad». «No dé usted lecciones de democracia desde el populismo estridente», reprochó el presidente al portavoz de Podemos, negando que su grupo votara hace unos meses en contra de eliminar aforamientos.

Con el portavoz del PSOE, Rafael González Tovar, el jefe del Ejecutivo se enfrascó en una guerra de cifras sobre la situación de la Región tras 21 años de Gobierno del PP. Según Tovar, los pensionistas de la Región cobran menos que en otras comunidades, hay menos docentes, mayores listas de espera y más población en situación de pobreza. «Usted y yo sabemos que Murcia es una gran región, una región próspera y con futuro, que crea empleo por encima de la media y tiene servicios públicos de calidad», respondió Sánchez, criticando que Andalucía, donde siempre ha gobernado el PSOE, «es la región con más paro y menos renta per cápita de toda Europa».

A la pregunta del portavoz del PP, Víctor Martínez, sobre las medidas para seguir creando empleo, el presidente anunció que su intención es seguir bajando impuestos, aunque no precisó cuales. Señaló también que se ha aumentado en 51 millones de euros el presupuesto para fomentar políticas de empleo.