Dos semanas. Es el tiempo que tienen los partidos políticos para formar un Gobierno y evitar que se tengan que celebrar nuevas elecciones generales ante la incapacidad del Parlamento de investir a un presidente, algo inédito en la historia democrática de España y con escasos precedentes en la historia europea.

Si a las 00.00 horas del próximo día 3 de mayo nadie ha conseguido la confianza del Congreso de los Diputados para ser presidente del Gobierno y conformar un Gabinete, el presidente de la Cámara Baja, Patxi López, tendrá que disolver las Cortes, tras lo cual el rey Felipe VI convocará de nuevo elecciones generales para el 26 de junio, conforme al plazo legal de 54 días de periodo electoral. Dicho decreto no lo podrá firmar el presidente Mariano Rajoy, ya que excede de sus competencias estando en funciones, sino que llevará la rúbrica del jefe de Estado y del presidente del Congreso de los Diputados.

En estos momentos todo apunta a que los ciudadanos serán llamados de nuevo a las urnas en junio, sobre todo tras el fracaso de las negociaciones entre PSOE, Ciudadanos y Podemos para conformar una mayoría. Los socialistas tampoco parecen estar por la labor de escuchar la oferta de Rajoy para crear una gran coalición, por lo que el tiempo se acaba y las posturas siguen estando enconadas. Pero como mientras hay vida, también hay esperanza, los partidos políticos de la Región, unos más y otros menos, confían aún en que se puede producir un acuerdo de última hora (se le denomina «a la catalana», por el pacto 'in extremis' que llevó a Carles Puigdemont a la presidencia de la Generalitat, tras el paso atrás de Artur Mas) en el tiempo que queda para la fecha de disolución de las Cortes Generales.

Oficialmente, todos aseguran que no quieren elecciones. El PP, que no tiene nada que hacer mientras el PSOE siga en su negativa de negociar, afirma no obstante que si hay nuevos comicios en junio va a realizar una campaña muy intensa. El PSOE es el que más se resiste a la opción de las nuevas elecciones, y en estas dos semanas van a reforzar sus llamamientos a Podemos, que se remite a la consulta que celebra este fin de semana con sus bases.

Ciudadanos, por su parte, animado por las encuestas que auguran una subida en caso de elecciones (la publicada esta pasada semana por Metroscopia situaba a C's como segunda fuerza en la Región y la única, junto a IU, que subiría en porcentaje de votos) señala con contundencia que prefiere volver a las urnas que Podemos esté en el Gobierno.

El rey Felipe VI ha convocado la tercera ronda de consultas con los líderes de los partidos para los días 25 y 26 de abril, con el objetivo de proponer, para el final de esa semana y comienzos de la otra, un candidato a la presidencia tras la investidura fallida del líder del PSOE, Pedro Sánchez, en marzo. Por tanto, esta semana que comienza debe ser decisiva para saber si hay o no Gobierno.

Todo lo marcará el resultado de la consulta de Podemos, aunque lo previsible es que los inscritos de la formación morada rechacen mayoritariamente unirse al acuerdo entre PSOE y Ciudadanos. Entonces los socialistas tendrán que decidirse de una vez por todas. O se echan en manos de Podemos y los nacionalistas o buscan una fórmula junto a C's y PP. Si no, otra vez a las urnas.