El Servicio Murciano de Salud (SMS) podría ahorrarse 107 millones de euros si concertara con la sanidad privada la prestación de ciertos servicios de diagnóstico de enfermedades que necesitan hospitalización, según las conclusiones del estudio ´Eficiencia Comparativa de la sanidad privada en la Región de Murcia´. Esto sería así bajo el supuesto de no congestión y de acuerdo con la imputación de costes que publica en el BORM el propio SMS.

El informe, realizado por Ildefonso Méndez, de la Universidad de Murcia, y César Nebot, del Centro Universitario de la Defensa-UPCT, apunta a los diagnósticos de la ´Osteoartrosis localizada no específica´; el ´Cálculo de vesícula biliar sin mención de colecisticia´; ´Otros niños nacidos antes de término´ y ´Neoplasia maligna de la vejiga´, como los responsables de, al menos, un 5% de esos cien millones de ahorro.

Los autores utilizaron datos estadísticos de los años 2011 y 2012 y, según explicó César Nebot, «en el 96% de diagnósticos no se encuentran diferencias de eficiencia en tiempo entre la pública y la privada, y del 4% restante, el 80% de veces la privada es superior. Es en este porcentaje donde se podría dar el ahorro». «O el sistema público mejora en estos diagnósticos, o le merece la pena concertarlos», añadió Nebot.

Otra de las conclusiones destaca que los tiempos medios de estancia en un hospital privado son, para el mismo diagnóstico principal al alta, inferior en más de 8 de cada diez casos, de ahí el potencial ahorro.

«Hemos encontrado que las estancias en los hospitales privados se reducen, al menos, a la mitad respecto a las de los centros públicos para un mismo diagnóstico principal», indicó el investigador.

Por último, en el informe se constata que la sostenibilidad del Sistema Regional de Salud, a tenor de la evolución de las finanzas regionales, «queda comprometida». El informe se basa en que se estimó que el gasto sanitario sería sostenible si el PIB regional crecía a una tasa anual promedio de entre un 4 y un 5%. Sin embargo, el crecimiento fue de un -1,7% en 2013, «un valor muy alejado del necesario para la sostenibilidad».