El TSJ ha desestimado el recurso que un agricultor de Mula presentó contra la resolución de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) que lo multó con 4.000 euros por regar cítricos sin autorización.

La sentencia confirma la resolución sancionadora que le obliga a abonar los 2.270 euros en los que fueron evaluados los daños producidos al dominio público hidráulico con su actuación. Afirma la sala que, según el expediente, la multa le fue impuesta al comprobarse tras la denuncia de la guardería fluvial de la CHS que había plantado los cítricos sin autorización e instalando riego por goteo. Dice el TSJ que el apelante forma parte de una comunidad de regantes, pero cometió la infracción al desviar un volumen de agua para unas parcelas fuera de esa zona.