Serafín de Alba, el dueño del huerto donde fueron enterrados los cadáveres de la jugadora holandesa de voleibol Ingrid Visser y su pareja Severein Lodewijk, pidió ayer la exculpación en la causa por este doble crimen a través de un recurso de apelación que se ha visto ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Murcia.
El letrado de De Alba solicitó el sobreseimiento de la causa con respecto a este acusado al señalar que no existe prueba ni indicio alguno que demuestre que conociera con anterioridad la comisión del asesinato de la pareja, ocurrida hace ahora casi tres años en una casa rural de Molina de Segura.
