El próximo domingo, día 20, a las 5.30 horas comienza la primavera. La nueva estación entrará rodeada de nubes, precipitaciones y bajada de temperaturas, pero la tendencia que marcan los modelos es que, en la Región, será más caliente y más seca de lo habitual.

Esta es la predicción que ha realizado la Agencia Estatal de Meteorología, y que su directora territorial, Juan Esteban Palenzuela, explicó ayer: «Entre abril y junio se espera que las temperaturas tengan valores superiores a los normales; mientras que las precipitaciones estarán por debajo de lo habitual para esta época».

Una previsión lamentable, ya que la primavera es, según recordó Palenzuela, la segunda estación más lluviosa tras el otoño que tiene esta Región.

Pese a todo, el director territorial no consideró que sea consecuencia del cambio climático. En su opinión, «aunque sí vemos una clara tendencia en las temperaturas de que se está produciendo un calentamiento, no lo vemos en las lluvias; periodos de sequías los ha habido desde siempre».

Días santos, días frescos

Por otra parte, el comienzo de la Semana Santa en la Región está marcado por temperaturas que descenderán, desde hoy, hasta cuatro grados por debajo de lo normal. Además, la entrada de una borrasca de aire frío provocará nubosidad persistente que traerá lluvias más o menos generalizadas, y que se mantendrán durante el resto de la próxima semana.

De este modo, el Viernes de Dolores será un día fresco y nuboso, con alguna precipitación, más probable en el litoral. El peor día, según la Aemet, será el martes, ya que las temperaturas bajarán hasta los 16-17ºC y chubascos más generalizados.

Entre el Miércoles y el Viernes Santo amanecerá despejado pero conforme avance el día se nublará, con posibilidad de chubascos por la tarde, especialmente en el interior de la Región.

Las temperaturas máximas irán subiendo, mientras que descenderán las mínimas.

En cualquier caso, «la atmósfera es un sistema caótico y sólo podemos hacer estimaciones», apuntó Palenzuela.