La desalinizadora de Escombreras tiene nueve meses de plazo para construir una nueva toma de agua que le permita dejar de captar los caudales en la dársena de Escombreras. El presidente de la Autoridad Portuaria, Antonio Sevilla, que ayer compareció ante la comisión de la Asamblea Regional que investiga los contratos de la planta, cree la empresa propietaria de la desalinizadora de Escombreras «va muy justa» de tiempo para construir la nueva toma de agua fuera de la dársena antes de que expire la prórroga concedida hasta diciembre de este año.

Sevilla ha defendido la legalidad de la prórroga concedida a la propietaria de la planta, la sociedad Hydro Management, en contra de la decisión del último consejo de administración de la Autoridad Portuaria presidido por su antecesor, Adrián Ángel Viudes. Destacó especialmente que un abogado del Estado forma parte del consejo de administración del Puerto, lo que avaló el acuerdo. «A finales de este año terminaría la autorización que se da por tres años, y hasta ahora lo único que han hecho es acercarse a hablar con los técnicos. No creo que haya muchos más trabajos detrás», aclaró.

En el caso de que concluya el plazo sin que la empresa haya aportado el nuevo proyecto y los trámites exigidos, dijo que se remitiría la decisión a Puertos del Estado y a los servicios jurídicos para que sean ellos los que «aporten el rigor y pidan la documentación que corresponda o que tengan que pedir», aclaró

Antonio Sevilla reiteró que la condición es que la toma para la desaladora se haga fuera de las aguas de la dársena y apuntó que «algo tienen que hacer porque se tienen que marchar».

Asimismo, reconoció que un puerto no es el mejor lugar para poner una captación de aguas de la desaladora. «Las tomas de aguas se deben hacer en sitios lo más limpios posible y el puerto o lo es», añadió. Sin embargo coincidió con su antecesor en que el problema no reside tanto en la calidad del agua de la dársena, como en eludir las posibles responsabilidades que podrían exigírsele a la Administración portuaria en caso de que fuese necesario interrumpir la captación por algún motivo.