José Manuel Nicolás comenzó su discurso dando gracias y diciendo que «es un honor» que lo recibieran en Madrid.

«Trabajo, dedicación y compromiso. Respuesta judicial bien motivada y en tiempo razonable. Los principios que inspiran el proceso de modernización de la Justicia. Esos son los tres pilares básicos de mi programa de actuación. Sin trabajo, sin dedicación y sin compromiso estamos abocados al fracaso», aseveró el ponente. «Más que de un objetivo, estamos hablando de una obligación. O de un objetivo irrenunciable», espetó.

«La modernización de la Audiencia Provincial exige mucho más. Me estoy refiriendo al diálogo institucional constructivo, a la mediación y a la carta de derechos del ciudadano. Si queremos que la Audiencia sea un tribunal que responda a las exigencias del siglo XXI, no debemos descuidar esos aspectos», pronunció.

Nicolás también habló del «cuidado de las relaciones institucionales, desde el respeto y el diálogo», pues «ese diálogo, extendido en sentido amplio, facilita la dura tarea de los tribunales y permite mejorar la calidad del servicio público de Justicia».

«El importantísimo que el presidente de la Audiencia Provincial sepa escuchar, y escuche a sus magistrados», resaltó. «Observar, escuchar y sugerir», ha de hacer, en su opinión, el presidente de este organismo.

Apeló al programa Educando en Justicia y la posibilidad de que estudiantes hagan prácticas en las instituciones, y al Consejo de Hombres Buenos, «reconocido patrimonio de la Humanidad por la Unesco».

Nicolás también aludió a la Ley Orgánica del Poder Judicial a las «herramientas» que, en su opinión, han de ser potenciadas para ofrecer un mejor servicio al ciudadano. «Murcia es pionera y ejemplo en mediación», recordó, al tiempo que habló de «impulsar la mediación en segunda instancia y en Cartagena». También planteó la posibilidad de crear una Unidad de Mediación en la ciudad portuaria.