'Enfermedad renal y niños. Actúa pronto para prevenirla' es el lema que se ha elegido este año para la celebración hoy, 10 de marzo, del Día Mundial del Riñón. En la Región, unos sesenta niños sufren de una enfermedad renal crónica, y la intención de todos los colectivos implicados en esta patología es lanzar un mensaje claro: no hay que esperar a ser mayor para cuidar los riñones.
La responsable de la sección de Nefrología Pediátrica del hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia, Carmen Vicente, destaca la necesidad de trabajar en la prevención de esta enfermedad en los menores, junto con el diagnóstico precoz del daño renal.
«Si lo detectamos a tiempo es posible trabajar para que la enfermedad no vaya a más», explica, y destaca cómo uno de los síntomas habituales que dan la voz de alarma son las infecciones de orina, que, por otra parte, son muy controlables y tratables.
«La obesidad y la hipertensión también pueden incidir en el desarrollo de esta patología, por lo que hay que estar muy pendientes», añade la doctora que subraya a la obesidad como «la epidemia del siglo XXI» en los menores.
«Las dietas se descuidan mucho y son factores a tener muy en cuenta junto con los hábitos de vida saludables; éstos hay que potenciarlos para evitar que un niño termine necesitando un trasplante», comenta Vicente, quien no deja pasar la oportunidad para destacar que también el humo del tabaco provoca la pérdida de proteínas en los niños.
La responsable de Nefrología pediátrica de la Arrixaca comenta que «hay niños que sabemos que van a terminar trasplantados, pero si siguen todas las pautas que hemos comentado antes pueden entrar en el quirófano muchos años más tarde».
En la Región de Murcia son muy pocos los casos de trasplante pediátrico que se producen anualmente. Oscilan entre los dos o tres casos y estos son enviados a los centros de referencia nacional de Madrid, Valencia y Barcelona.
«Cuando se presenta un caso muy avanzado, el primer objetivo es el trasplante; después la diálisis peritoneal y por último la hemodiálisis, que es la menos indicada para los menores», explica la doctora. Los donantes vivos -especialmente familiares del menor- son los más habituales.
Actualmente, solo hay un niño en diálisis peritoneal y ninguno en hemodiálisis.
«La apertura del nuevo materno infantil supondrá una mejora de todos los servicios pediátricos de la Arrixaca, entre ellos el de Hemodiálisis que se verá ampliado hasta cinco puestos de tratamiento», comenta Vicente.
« Y estamos especialmente satisfechos con la nueva consulta de transición, en la que los adolescentes que van a dejar la sección pediátrica conocen al nefrólogo de adultos; las familias lo agradecen porque acaban con muchas incertidumbres», concluye.
