La salida de prisión del líder abertzale Arnaldo Otegi, que ha pasado cinco años encarcelado por pertenencia al entramado de ETA, marcó la mañana previa a la primera sesión del debate de investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno. Sobre todo con las declaraciones del dirigente independentista vasco, que se definió como «un preso político» tras su salida del centro penitenciario de Logroño, y el apoyo que le mostró el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, quien afirmó en la red social Twitter que la salida de prisión de Otegi era «una buena noticia para los demócratas», exigiendo que nadie vaya nunca a la cárcel en España «por sus ideas».

Rafael Catalá respondió a ambos ayer en Murcia. «En España no hay presos políticos desde hace muchos años», respondió el ministro, quien recordó que en un Estado de Derecho «las personas que están en prisión están condenadas por tribunales independientes después de un proceso judicial que garantiza los derechos de las partes». En el caso de Arnaldo Otegi, fue condenado «por un delito tipificado en el Código Penal y no por sus ideas, porque en España no se encarcela a nadie por sus ideas políticas».

Catalá también lamentó el tuit de Pablo Iglesias. «Se califica a sí mismo y califica cuál es su ideario y su forma de entender la vida», dijo el titular de Justicia, quien recordó que el líder de Podemos alaba también a políticos como Hugo Chávez o Nicolás Maduro, «que encarcelan a los opositores que piden la libertad de prensa». Exigió a Pablo Iglesias respeto ante el dolor que causó el terrorismo etarra en España durante 30 años.

Sobre una posible vuelta a la política de Otegi, el ministro recordó que está inhabilitado para ejercer cargo público hasta 2021.

"Sin atajos" en Cataluña

Por otro lado, el ministro confirmó en Murcia que cuando comiencen a trabajar en el Parlament catalán las ponencias conjuntas de las leyes de desconexión del Estado presentadas por la coalición JxSí y la CUP, el Gobierno las impugnará ante el Tribunal Constitucional que, confía Catalá, «las suspenderá y declarará inconstitucionales».

Reiteró que en España «no hay atajos que puedan burlar nuestra Constitución aunque algunos sigan insistiendo en ello». «Estamos viendo permanentemente activaciones que en ocasiones el Constitucional está suspendiendo y anulando, y dictando sentencias y resoluciones que paralizan ese tipo de planteamientos; y hay algunos que lo que están permanentemente es buscando resquicios, alternativas o alguna treta para encontrar esas posibilidades de ir hacia adelante en un proceso que está abocado al fracaso».