«Da pena, pero me hace ya hasta gracia». Es lo que declaraba ayer el fiscal jefe, Manuel López Bernal, a propósito de la polémica surgida después de que la asociación Justicia y Libertad interpusiese dos denuncias en su contra: por la construcción de su casa hace 32 años y por la adjudicación en 2012 de un contrato de la Comunidad Autónoma a la empresa de su hija.

López Bernal no entiende «que saquen la construcción de mi casa de hace 32 años» para hacer una acusación que «es absolutamente mentira, palabra por palabra». «Me imagino que quien lo hace sabe que ha sido así», remarcó, en declaraciones a Onda Cero. Asimismo, anunció que «ejercitaremos las correspondientes acciones penales». De Justicia y Libertad, señaló que es «una asociación que no sé de dónde ha surgido» pero que lo ha hecho, en todo caso, «para incriminarme en una estupidez», dijo Manuel López Bernal.

Resaltó que «la de Murcia es la fiscalía de España que más ha movido la corrupción, no sé si un 20% por encima de Baleares», al tiempo que especuló con que es posible que algunos sectores desean «un fiscal más dócil contra la corrupción».

Preguntado por si su intención es seguir en el cargo, Manuel López Bernal destacó que «evidentemente que me presentaré. Yo no me pienso ir. Yo quiero seguir trabajando y sobre todo no estoy acostumbrado a que nadie me eche. ¿Pedir la plaza? Indiscutiblemente».