Más leña al fuego en el PP regional. El expresidente Alberto Garre respondió esta mañana, en declaraciones a la emisora Onda Cero Murcia, a las críticas que recibió de parte de su sucesor en el cargo, Pedro Antonio Sánchez, tras su declaración en la comisión de investigación de la desaladora de Escombreras, cuando le pidió que aclarara a qué se refería cuando afirmaba que la planta había sido "un mal negocio", porque, según Sánchez, "un Gobierno no hace negocios".

"Cuando se presta un servicio público a través de otro tipo de empresas que no sea de la Comunidad Autónoma, hay que establecer un negocio contractual. Si alguien piensa en otro tipo de negocio, es porque le traiciona el subconsciente. A mí no. Todo lo que hace la Administración y contrata con terceros es un negocio contractual. Me resulta muy difícil salir a dar lecciones de primero de Derecho a alguien que me pide que aclare qué es un negocio", señaló el expresidente, que todavía es el máximo responsable del PP de Torre Pacheco y dirige el Comité de Derechos y Garantías del PP regional, que precisamente se reúne esta tarde para analizar los casos de supuesta corrupción que afectan al partido en Molina de Segura y Los Alcázares.

Alberto Garre, entrevistado por la periodista Rosa Roda, arremetió también contra la actuación del Grupo Parlamentario Popular ayer durante la comparecencia de Antonio Cerdá en la comisión de investigación. Los populares sacaron a la luz unas palabras suyas del año 2014 defendiendo la desaladora en sede parlamentaria y rechazando la propuesta del PSRM de que se creara una comisión de investigación sobre la misma.

"Efectivamente, en 2014 fijé la posición del Grupo Parlamentario Popular en contra de la creación de una comisión de investigación sobre la desaladora de Escombreras y lo hice cargado de los argumentos que me facilitó, como siempre, el Gobierno regional. Los mismos argumentos que el Gobierno regional sigue manteniendo hoy. Yo entonces no oculté nada, defendí mi posición en base a los documentos de los que disponía. La semana pasada en la Asamblea tampoco oculté nada y defendí mi posición con arreglo a tres documentos, desde luego aparecidos muy posteriormente a aquella intervención en la Asamblea. Dos de la intervención general de la Comunidad, del interventor, y uno de la asesoría jurídica que vienen a decir no estaba todo tan claro como entonces y hoy siguen manteniendo algunos miembros del Consejo de Gobierno de entonces. Ante estos tres documentos, y teniendo yo conocimiento de ello y siendo presidente de la Comunidad, entenderá todo el mundo que conozca los informes posteriores uqe uno debe cambiar su posición y no mantenerla y no enmendarla", justifica el expresidente, que considera "impropio de un grupo parlamentario" que no se le preguntara a él la semana pasada sobre aquella intervención de 2014.