Una empresa con 600 empleados en su plantilla, distribuidos en distintos centros, puede justificar el despido de uno de ellos por motivos económicos, según se recoge en una sentencia dictada por la Sala de lo Social del TSJ.

La sentencia estima el recurso que la empresa 'A.E.N.C., S.L.' presentó contra la resolución de un Juzgado de lo Social que declaró improcedente el despido de una auxiliar administrativa que trabajaba en su centro de Murcia.

El Juzgado condenó a la demandada a readmitir a la despedida en las mismas condiciones laborales o a pagarle una indemnización cercana a 13.400 euros. Ahora el TSJ, al estimar el recurso y declarar procedente el despido, señala que la empresa demostró con la documentación correspondiente que durante tres trimestres consecutivos el nivel de ventas había disminuido.