La Mesa del Agua ha encontrado a su particular chivo expiatorio por el retraso en la puesta en marcha de los pozos del Sinclinal de Calasparra que ayudarían a paliar la sequía, con 25 hm3, durante los próximos tres meses: el presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), Miguel Ángel Ródenas.

La Mesa, reunida ayer en la sede de la patronal Croem y que está integrada por regantes, organizaciones agrarias, empresariales, agroalimentarias, y grandes productores y exportadores hortofrutícolas, reclamó que se aprobara en el Consejo de Ministros del viernes la apertura de estos puntos de agua, cuyo uso sólo está pendiente de la exención del trámite medio ambiental.

José Mª Albarracín, presidente de Croem y portavoz de la Mesa, expresó su queja por la actuación de Ródenas, que no está siendo todo lo rápida que debiera, dijo; declaración apoyada también por el presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, José Manuel Claver.

Albarracín pidió a Ródenas que «se identifique plenamente con la actitud de los regantes murcianos» ya que aprecian que «no hay una perfecta sintonía en este momento».

Los agricultores esperan también que la CHS agilice los trámites para autorizar la cesión de otros 30 hm3 procedentes de la cesión de recursos de la Junta Central de Usuarios Regantes del Segura (Jucers). Claver explicó que los usuarios de la cuenca serían indemnizados por el Sindicato si finalmente la Junta de Gobierno de la CHS aprueba la sustitución de recursos salvaguardando sus derechos. Y reclamó a Ródenas que sea sensible a esta demanda y que no se pierda tiempo en convocar al organismo de cuenca dada la difícil situación actual.

Además, los regantes tienen pendiente de cerrar el principio de acuerdo alcanzado con la Acequia Real del Júcar para dotar con 15 hm3 de agua al Trasvase y han conseguido una cesión de 3,5 hm3 del Heredamiento de Molina.

La CHS responde

Mientras, fuentes de la CHS respondieron que su presidente está trabajando «sin descanso» con el ministerio de Agricultura, y que incluso ayer estaba en Madrid, «para intentar que el Consejo de Ministros apruebe cuanto antes la apertura de los pozos con la exención del trámite medio ambiental». Apuntaron que «hay que medir mucho todos los pasos que se dan y hacerlo dentro de la legalidad, para evitar que las decisiones acaben en los tribunales».

Por último, destacaron que la CHS «sabe perfectamente la situación de los regantes».