La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia (TSJ) ha revocado la sentencia de un Juzgado que reconoció la incapacidad absoluta para todo trabajo a un empleado que sufre diabetes mellitus y al que se tuvo que amputar una pierna por encima de la rodilla.

La sentencia señala que pese a esa situación, el demandante, de 56 años, no está incapacitado para toda actividad laboral, "ya que las tareas más livianas o sedentarias puede llevarlas a cabo".

El TSJ estima así el recurso que el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) presentó contra la sentencia de un Juzgado de lo Social de Murcia que condenó a este organismo a pagarle una pensión vitalicia mensual en cuantía del 100 por ciento de su salario base.

La Sala recoge, como hizo con anterioridad el Juzgado, que el demandante padece "isquemia arterial crónica grado II, que, tras dos by-pass, precisó amputación supracondilea del miembro inferior derecho, con infección grave en la región inguinal e ingreso hospitalario, padeciendo también diabetes mellitus tipo II insulinizada".