La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia (TSJ) ha dado la razón a una auxiliar de enfermería y ha declarado que las patologías que padece la incapacitan de forma permanente para seguir en el servicio activo en su profesión.

La sentencia estima así el recurso que la demandante presentó contra la resolución de un Juzgado de lo Social que rechazó su demanda y absolvió al Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS). Afirma el TSJ que esta trabajadora, de 58 años de edad, sufre fibromialgia, lumbalgia, polidiscopatía, artrosis y trastorno depresivo, entre otras enfermedades.

Y añade que estas patologías permiten concluir que se encuentra en situación de incapacidad permanente total para su profesión habitual, «con las consecuencias económicas inherentes a esta declaración».