El alcalde de Molina de Segura, Eduardo Contreras, presidió ayer la Junta de Portavoces extraordinaria que él mismo convocó el jueves, tras conocerse que el caso Púnica le había salpicado, tal y como ayer informó LA OPINIÓN. En concreto, un documento de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil apunta a que el regidor pudo haber cometido un delito de tráfico de influencias y otro de malversación de caudales públicos. Tras dicha reunión, la portavoz socialista Esther Clavero pidió que Contreras renuncie a su cargo mientras no se esclarezcan los hechos.

Para el PSOE, los vecinos de Molina de Segura «necesitamos saber si existe vinculación o no entre el alcalde y las importantes acusaciones que recoge la prensa y que podrían apuntar a Eduardo Contreras como el presunto autor de los delitos de tráfico de influencias». Según informó Infolibre, el documento de la Guardia Civil señala que «con el contrato de Plan de Comunicación Digital realizado por el Instituto de Turismo de la Región de Murcia se habrían encubierto, según los datos disponibles, los trabajos personales de reputación online del alcalde de Molina de Segura».

Ante esto, Clavero asegura que «nuestros conciudadanos deben tener la tranquilidad de que están gobernados por personas honestas y cualquier duda al respecto debe ser despejada de forma inmediata y pública», insistiendo en que pedirá a Eduardo Contreras «que deje su cargo en tanto en cuanto no se resuelvan todas las dudas que rodean la figura del alcalde molinense». Asimismo, desde el PSOE señalan que no es la primera vez que se pone en tela de juicio la gestión de Contreras, «ya envuelto en el caso de la permuta de la escombrera, aún sin resolver». Ahora relacionado en un proceso de mayor calado nacional, la trama Púnica, en la que está imputada la que fuera una de sus manos derechas en el ayuntamiento de Molina de Segura, Mariola Martínez, exconcejala en el Consistorio y más tarde directora general de Turismo.

Para Clavero, «son demasiadas las sospechas que recaen sobre Eduardo Contreras, que además ha estado al frente de la mala gestión ante la empresa municipal Sercomosa, con participación de Acciona, que hoy se encuentra ante una grave crisis, situación de la que es en gran parte responsable». «No podemos permitir que el Ayuntamiento sostenga a un alcalde que pone a la institución bajo sospecha», añadió. Por su parte, Contreras, tras conocerse esta información, aseguró que «son hechos que se conocían hace más de un año», y que el citado informe «no deriva de ninguna investigación posterior a la que finalizó en 2014».