José Manuel Sánchez-Vizcaíno ostenta la cátedra de Sanidad Animal en la Univesidad Complutense de Madrid y es director del laboratorio de referencia de la OIE. Doctor Honoris Causa por la Universidad de Murcia, el científico murciano ha querido poner su granito de arena en defensa de la laguna formando parte del grupo multidisciplinar que integra el Pacto por el Mar Menor. Ayer participó en Murcia en la segunda jornada, en la que se habló sobre el Mar y la Ciencia.

Usted conoce muy bien el Mar Menor. ¿Cuál es su diagnóstico?

Lo conozco muy bien. No en vano he pasado mis veranos de niño en Los Alcázares. Allí aprendí a nadar, a bucear... Y según iban pasando los años he sido testigo directo de su contínuo deterioro. Es una joya única en el mundo, pero lamentablemnte también es un enfermo crónico en fase terminal. La realidad es que hemos estado todos, y me incluyo, muy lentos a la hora de reaccionar, esperando a que alguien tomara la iniciativa. Por eso estoy muy contento con la puesta en marcha de este Pacto por el Mar Menor. Debemos concienciar a la sociedad en su conjunto del grave problema que tenemos.

Una de las iniciativas de la administración es construir unos tanques de contención para evitar vertidos de nutrientes al mar procedentes de la agricultura.

No creo que estos tanques sean la solución. La actual agricultura es muy extensiva y los aportes de nutrientes son bestiales. El Mar Menor ya sufrió un primer revés importante con la apertura del puente del Estacio; ahora está sufriendo el segundo. No puede digerir todos estos vertidos continuados. Sin perjudicar a los agricultores, hay que poner en marcha medidas más drásticas, como tratamientos previos, aunque sean caros, que permitan su reutilización como abonos, por ejemplo.

¿Hacia dónde se dirigen sus propuestas?

Ante todo debemos tener claro el Mar que queremos: si para bañarnos, que tenga vida, sólo para pasear en barco.... A continuación yo me centraría en cuatro puntos básicos: el primero sería el diagnóstico sobre su estado de salud, que sinceramente creo que está suficientemente hecho; el segundo, si a este enfermo terminal que es el Mar Menor lo tenemos bien monotorizado, si mejora o no, que yo creo que no. En tercer lugar, si tenemos previsto un tratamiento, cuál sería. Actualmente hay tecnologías muy avanzadas que se podrían aplicar. Y cuarto, hasta dónde podemos recuperarlo, porque de su antigua flora y fauna ya queda poca.

¿Entonces ve viable la recuperación del Mar Menor?

Sí, está terminal pero aún tiene vida y puede recuperarse, siempre y cuando las acciones sean rápidas. Realmente no sabemos cuánto tiempo nos queda antes de que sea demasiado tarde. Además, aspectos como el calentamiento global le afecta también muy directamente. Ha sido horrible lo que el Mar Menor ha tenido que soportar este verano... Y este aspecto puede distorsionar mucho su evolución.