­Hay una manera de crear empresas que sean solidarias y comprometidas con el desarrollo sostenible; hay algo más que la mera captura de beneficios económicos. Y esa búsqueda encuentra su meta en el cooperativismo. Su influencia como modelo alternativo en los municipios se puso de manifiesto el pasado viernes en unas jornadas que reunieron en el Balneario de Archena tanto a numerosos alcaldes murcianos como a emprendedores, que decidieron aventurarse en las entretelas del mundo de las cooperativas y la economía social, pues ambas se han destapado como un método real para volver a generar empleo.

El elegante salón del hotel León del Balneario fue el escenario escogido para la celebración de las jornadas 'Municipios, cooperativismo y economía social´, enmarcadas en el título Una economía para las personas, para la creación de empleo y para el desarrollo local. El encuentro, en cuya organización colaboró la Unión de Cooperativas de la Región de Murcia (Ucomur), fue impulsado por el grupo de Acción Local de la Asociación para el Desarrollo Rural Integrado de la Vega del Segura (ADRI), compuesto por doce localidades, y entre las que se encuentra el municipio de Archena.

Precisamente, la alcaldesa de Archena, Patricia Fernández, ejerció como anfitriona de una cita en la que estuvieron presentes regidores -de Lorquí, Alguazas y Campos del Río-, concejales, tenientes de alcalde -como la de Molina de Segura-, así como técnicos y trabajadores municipales. Todos asistieron bajo un compromiso: estudiar la aplicación de la economía social y del cooperatvismo en sus localidades. Además de ellos, se congregaron curiosos emprendedores e incluso estudiantes, como el grupo de compañeras de Abarán, que cursan Ayuda a Domicilio en el SEF.

«La labor de la economía social es encomiable. Elogiamos un modelo emprendedor y colectivo que genera riqueza y que está teniendo un papel relevante en la salida de la crisis», avanzaba la regidora de Archena, que inauguró la jornada en una mesa que compartió con la consejera de Agua, Agricultura y Medio Ambiente, Adela Martínez-Cachá, y con el director general de Relaciones Laborales y Economía Social, Leopoldo Navarro, quien destacó después que Murcia se ha convertido en un referente de la economía social.

Y es que Navarro mencionó que la Región es la comunidad donde más ha aumentado el número de cooperativas y donde la economía social tiene una mayor influencia en el PIB. «No es causalidad el nombre (Economía Social) de la dirección general que represento», añadió, «pues está generando empleo de calidad, de larga duración y probablemente para toda la vida. Por eso, la partida destinada a este modelo es la que más ha crecido en los presupuestos de este año», comentó.

La consejera de Agricultura, en su turno de palabra, aseguró que unir municipalismo, cooperativismo y economía social es «un acierto», porque «donde hay que generar oportunidades es en el territorio local». Martínez-Cachá, que afirmó que «el desarrollo rural es la clave del futuro», aplaudió la conmemoración de unas jornadas que «analizan cómo se pueden generar oportunidades». Apostilló que las 130 cooperativas agrarias han sido «un éxito» y concluyó que «la economía social es un pilar de la Región de Murcia».

Emprendidas las inauguraciones, la jornada se prolongó durante toda la mañana y trazó varios escenarios del cooperativismo a través de cuatro ponencias, conducidas por el presidente de Ucomur, Juan Antonio Pedreño, quien calificó el acto como «muy positivo». «Hemos demostrado cómo se puede mejorar el bienestar de los ciudadanos y hemos mostrado cómo el desempleo puede bajar hasta un 8% y un 5% a través del cooperativismo», valoró el líder de Ucomur, quien aprovechó la cita para exigir el compromiso de la Comunidad y de todas las corporaciones municipales: «Necesitamos concienciarnos todos».

Clausuró el acto el director general de Desarrollo Rural y Forestal, Federico García. Fue el colofón a unas mañana entregada a desterrar la idea de que no hay solución frente al paro.