El mundo entero llora a las víctimas de los brutales atentados de París y vive temeroso de que se puedan producir nuevos ataques. Mucho sabe sobre terrorismo yihadista el capitán Tomás Pérez Gil, jefe del Grupo de Información de la Guardia Civil. En esta entrevista explica los orígenes y el pensamiento de los salafistas yihadistas, que no permiten otra intepretación del Corán que la suya y que, gracias a Internet, pueden difundir su mensaje con gran facilidad.

Los atentados de París han generado una psicosis generalizada. ¿Cómo debemos actuar los ciudadanos ante esta amenaza?

El miedo es libre. Pero los ciudadanos deben conocer que el terrorismo salafista yihadista está relacionado exclusivamente con un grupo concreto del Islam, con una secta, y no con la totalidad. No podemos criminalizar a 1.300 millones de musulmanes, que en su inmensa mayoría no plantean ningún problema. Sería una aberración pagarlo con ellos. ¿Estamos seguros en España? Los miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado nos dedicamos de forma constante y con espíritu proactivo a investigar cualquier vínculo que exista con el salafismo yihadista. Los murcianos pueden estar tranquilos en ese sentido. Estamos en un nivel de alerta importante, estamos a la que salta. Deben saber que estamos investigando para identificar cualquier elemento que pueda suponer una amenaza para la seguridad pública. Es nuestra obligación y estamos entregados en cuerpo y alma. Es lógico que la gente esté preocupada, pero no debemos cargar contra el que no tiene culpa.

¿Qué puede llevar a personas religiosas a cometer actos de este tipo en nombre de Dios?

Esta secta pertenece al madhab hanbalí, que por su propia doctrina y visión radical del Corán y la Sunna amenazó, amenaza y seguirá amenazando a Occidente. Porque su concepto de la vida es incompatible con el concepto que de la misma rige en Europa. Pretenden un retorno a los orígenes del Islam, con todas sus consecuencias. Hacen una lectura rigorista de los textos sagrados. Ideológicamente es un regreso a la época de Muhammad y de los 'sahabas', sus compañeros. Un periodo que va desde el nacimiento del profeta en 570 hasta el año 660, cuando se produce al cisma entre suníes, chiíes y jariyíes. Cualquier innovación (bid'a) en el Islam es para ellos una aberración y conduce al infierno. Hacen una lectura literal del Corán y no están dispuestos a ningún tipo de exégesis. Ese es el verdadero enemigo que tiene Occidente, porque la secta agrupa multitud de corrientes y de grupos, entre ellos Al Qaeda, que por cierto no está acabada ni mucho menos. Y, por supuesto, ahora Daesh, el mal llamado Estado Islámico, aunque es cierto que tiene estructura de Estado, porque maneja mucho dinero. Tiene muy claro cuáles son sus objetivos y su hoja de ruta está marcada. Pretende instalar un clima de terror a nivel global con amenazas y con hechos, y lo está consiguiendo. Lo de París es un ejemplo más dentro de esa escalada del terror.

¿Qué grado de penetración tiene Daesh en España?

Es una buena pregunta, pero de difícil respuesta. La herramienta principal de Daesh y de Al Qaeda, que además instrumentalizan muy bien, está en los medios de difusión a través de las redes sociales de Internet, como Facebook y Twitter. A través de esa red virtual llegan a donde quieran, a cualquier parte del mundo. Donde quiera que haya una persona que acceda a su información, quiera escucharles y seguir sus postulados, tenemos un enemigo potencial. Trazar mapas de penetración de Daesh sería aventurado.

¿Qué diferencias existen entre Daesh y Al Qaeda?

Daesh nace de Al Qaeda, en la época de la guerra de Irak, en 2004. Se especializaron al principio a combatir a tropas extranjeras en Irak. Luego sufre una evolución, hasta que el 29 de junio de 2014 Abu Bakr al-Baghdadi se autoproclamó Califa del Estado Islámico. Diferencias en cuanto a objetivos no hay apenas. Al final del túnel está la consecución del Califato global, no nos engañemos. Todos persiguen la islamización del mundo, la famosa Ummah, la comunidad de creyentes universal, que está recogida en los textos del Islam. No hacen más que repetir los pasajes que les interesan de los textos sagrados, y además de forma literal. Sin tocar ni una coma. Es el fundamentalismo llevado hasta su último extremo.

Con todo lo que costó acabar con el terrorismo de ETA, más doméstico. ¿Ve posible acabar con esta amenaza global?

Es una amenaza global porque está presente en Internet, porque llega fácilmente a todos los hogares. Es el arma principal que tiene Daesh. Están constantemente difundiendo vídeos propagandísticos, solo hace falta entrar en sus portales. Beber de esa doctrina está al alcance de cualquiera, sentado en una silla en casa, tranquilamente frente a un ordenador. Con los datos objetivos que tengo a mano, pienso que esto va para largo. Muchos expertos en terrorismo internacional coinciden en lo mismo. No estamos ante un terrorismo doméstico como el de ETA, que ya nos costó bastante erradicar. Esto no es nada comparable. Aquí hay una componente ideológica mucho más compleja, hay un mandato de islamizar la modernidad y están en ello.

¿No estaría la solución en la implicación de referentes religiosos del Islam moderado, como los imanes?

Hay un problema de fondo gravísimo en eso. El Islam es muy particular. Lo que está escrito, está escrito. Me atrevería a decir que hay tantos 'islam' como musulmanes hay en el mundo, porque es una cuestión de interpretación de los textos sagrados. Ya le digo que la mayoría nunca va a plantear este problema de terrorismo. Pero con la corriente salafista yihadista no hay posibilidad de encuentro. Porque hablamos de dos puntos de vista totalmente opuestos de entender la vida. ¿Cómo llegamos a un entendimiento cuando las posturas están tan lejanas? Es complicado, pero habrá que intentarlo. Posiblemente haya que concienciar a esa gran masa de musulmanes que no plantea ningún problema de convivencia para dar un paso adelante.

La principal fuente de financiación de Daesh es el petróleo...

El petróleo, los impuestos, los saqueos, el tráfico ilegal de obras de arte... El petróleo es una fuente financiación muy importante. Se ha publicado que tienen tal cantidad de petróleo que se situarían como el séptimo productor mundial de crudo de la OPEP.

¿Y quién lo compra?

No voy a profundizar en eso. El caso es que Daesh se financia y tiene un nivel de ingresos que les permite vivir con holgura. Hacen vídeos dignos de Hollywood. Los últimos que he visto ensalzan la vida en su Estado Islámico. Es una batalla que van ganando.

¿Cómo podemos colaborar los ciudadanos en la lucha contra el terrorismo yihadista?

No podemos ceder. Tenemos que seguir viviendo en nuestro marco de libertades y derechos. Ellos lo tienen claro y controlan muy bien el tiempo. No tienen prisa. Hay que asumir esta amenaza, sin alarmismos y colaborando con las fuerzas de seguridad. Cualquier información es válida. Si un ciudadano halla indicios concretos sobre algo que puede estar relacionado con el terrorismo internacional, bendito sea.