­Virginia Greville, que ayer visitó la Región por primera vez desde su llegada a España, fue recibida por el presidente de la Comunidad Autónoma, Pedro Antonio Sánchez, y mantuvo un encuentro con representantes de la patronal murciana en la sede de la CROEM. Su visita ya ha dado como resultado una posible misión comercial de empresarios de la Región a Australia, que le propuso ayer el jefe del Ejecutivo regional.

Australia es considerada desde Europa como en una especie de paraíso por explorar, no solo por parte de los inmigrantes que buscan un trabajo, sino de muchos europeos que aspiran a cambiar de vida.

La situación de la inmigración en Europa es muy difícil en estos momentos. Nosotros hemos afrontado durante muchos años una situación similar. Australia mantiene una actitud de acogida y de bienvenida hacia los extranjeros, pero para nosotros es muy importante que los inmigrantes y los refugiados lleguen de forma regulada. El problema para Europa y para Australia son las llegadas irregulares y las dificultades para distinguir entre refugiados e inmigrantes.

¿Tienen problemas, a pesar de vivir en un país tan grande?

Nosotros tenemos una población reducida en comparación con Europa. Hay 24 millones de habitantes, pero en un país muy grande. Por eso parece que hay muchas oportunidades, pero es importante entender que, a pesar del tamaño de Australia, gran parte del territorio no es habitable. Hay una gran parte del país en la que no se puede vivir. Por eso, entre el 80% y el 85% de la población vive en la costa, que son las zonas más habitables. Sin embargo, tenemos grandes ventajas y oportunidades, por el tamaño del país y sus recursos naturales. Por eso para otras personas de países menos afortunados es un destino muy deseado, y lo que pretendemos es ofrecer los servicios de educación o sanidad que precisan en condiciones adecuadas.

¿La distancia no es un problema para ustedes a la hora de entablar relaciones económicas con otros países?

La distancia no es un gran problema, salvo para el transporte de productos como las verduras frescas. Lo que se puede encontrar allí es más importante que la distancia. Ahora mismo se tardan 24 horas, pero no es tan diferente de hacer un viaje de doce horas. Lo que hay allí y lo que hay aquí es más importante que la distancia. Ese es mi mantra en España.

¿Los australianos no tienen la misma noción de los viajes?

Los australianos son los exploradores del siglo XXI. Hasta hace 30 años todos los jóvenes viajaban a Europa, porque la relación con este continente era muy importante. Ahora sigue existiendo esa conexión con Europa, pero los jóvenes también quieren viajar a Asia y a América del Sur. La distancia no es problema para nosotros, porque siempre hemos tenido que viajar muchas horas o incluso días para visitar otros países. Australia es un país multicultural, con personas procedentes muchos países diferentes. Hasta hace poco todos los inmigrantes venían de Europa, pero la gran mayoría ahora es de Asia, Oriente Medio y África. Por eso en mi país se hablan muchos idiomas. Tenemos una sociedad multicultural y muy tolerante.

¿Ha llegado a algún acuerdo con el presidente regional?

Me ha hablado de organizar el año que viene una misión de empresarios a Australia, y creo que es una buena idea. Es una oportunidad para crear vínculos y mejorar las relaciones comerciales.

¿Qué posibilidades de intercambio ve usted entre Murcia y Australia?

Nosotros somos un país muy abierto, con un gran interés en el mundo tanto en importaciones y exportaciones como en las posibilidades de inversión en ambas direcciones.

¿Las empresas de su país estarían interesadas en invertir en Murcia?

La balanza de la inversión está a favor de España, porque hay grandes empresas españolas con inversiones en infraestructuras, desalinización y energías renovables. Sin embargo, hay menos empresas australianas en España. Esta diferencia se debe a que Australia forma parte de la región Asia-Pacífico. Nuestros socios más importantes son China, Japón, EE UU, Corea del Sur y Singapur. En Murcia hay muchas industrias agrícolas, científicas y químicas que podrían encontrar en Australia muchas oportunidades para compartir experiencias y conocimientos y posiblemente para crear empresas conjuntas y colaboraciones con ventajas para ambas partes.