La prórroga del presupuesto de la Comunidad de este año a 2016 podría salirle muy cara a los ayuntamientos de la Región. Según anunció el consejero de Hacienda y Administración Pública, Andrés Carrillo, en la presentación del proyecto de ley que ayer aprobó el Consejo de Gobierno, el 31 de diciembre expira la moratoria que dio la Comunidad Autónoma hace tres años a los consistorios para devolver las subvenciones recibidas de la Administración regional que no han podido llegar a ejecutar por falta de recursos para completar la inversión prevista.

En algunos casos, las penurias presupuestarias llevaron a las corporaciones locales a destinar las subvenciones finalistas que les abonó la Comunidad a pagar nóminas y gastos corrientes que no estaban en condiciones de sufragar con sus propios ingresos.

Según los datos que ayer dio a conocer el consejero, los consistorios murcianos deben unos 107 millones a la Comunidad Autónoma en subvenciones, que tendrán que devolver antes de final de año si el Ejecutivo no consigue sacar adelante el presupuesto de 2016 y acaban prorrogándose las cuentas de 2015. Andrés Carrillo explicó ayer que la moratoria se estableció en los presupuestos de 2012, cuando la crisis dejó a los ayuntamientos sin ingresos para afrontar sus compromisos de gasto, con el fin de darles un respiro financiero.

Para evitar el colapso que causaría la devolución, el Gobierno regional ha incluido un artículo en el Proyecto de Ley de Presupuestos de 2016, que ampliaría la moratoria hasta 2019.

Andrés Carrillo asegura que esta deuda de 107 millones está repartida entre todos los ayuntamientos de la Región.