Más de treinta años como profesora y veinte como directora de colegio respaldan a Mariola Sanz, directora del colegio Nuestra Señora de los Ángeles de El Esparragal y presidenta de la Asociación de Directores de Primaria, para conocer qué necesidades tienen los alumnos y cómo les afecta la carga de deberes.

¿Deberes sí o deberes no?

Ni sí, ni no. Los deberes son necesarios si se plantean de una manera comedida. No se puede hacer un abuso desmesurado y excesivo, que es algo que sucede actualmente en algunos centros. No puede ser, porque el niño tiene que tener su tiempo para disfrutar, hablar con su familia, ver la tele un rato, jugar, leer… Tres horas diarias es un disparate.

¿Cuál sería la media ideal para dedicar a las tareas en casa?

Yo creo que de primero a tercero de Primaria lo ideal sería dedicar entre 15 y 20 minutos para reforzar algún trabajo de clase. En quinto o sexto de Primaria, con una hora va de sobra. Aun así, el trabajo se debe realizar en el colegio.

¿A qué achaca que se manden muchos deberes a los niños?

Creo que hay una falta de coordinación dentro del propio centro a la hora de planificar las distintas áreas. Hay diferentes maestros dando diversas asignaturas y no se ponen de acuerdo, como hacen, por ejemplo, a la hora de establecer las fechas de los exámenes para que no coincidan.

¿Hacer muchos deberes asegura el éxito escolar?

A veces el esfuerzo, el aprendizaje, ayuda al éxito escolar, pero hacer muchos deberes no lo garantiza. Lo que sí ayuda es a aprender a organizarse, a tener autonomía…

El fracaso escolar ¿es responsabilidad del profesor, del sistema educativo, de la familia o del alumno?

Todos tenemos nuestra parte de responsabilidad. En el sistema educativo, con tanto cambio de leyes, nos vuelven locos a los profesores. Hay demasiada burocracia, que llega a crear ansiedad y angustia, algo que se puede ver en los claustros de los profesores, y eso, evidentemente, puede repercutir en los alumnos, Por otro lado, la cultura del esfuerzo entre los estudiantes no existe y debemos trabajar para que no sea así, pero no solo en los centros, sino también las familias, porque también hay una falta de compromiso por su parte. En cuanto al profesorado, debemos modernizar los procesos de aprendizaje. En definitiva, creo que es un problema de todos.