La Comunidad de Regantes del Campo Alto de Lorca denunció ayer la difícil situación por la que atraviesan por falta de agua, y reclamaron una aportación de 600.000 metros cúbicos del río Luchena que solucionarían su problema sin suponer competencia alguna para las grandes comunidades de regantes.

El presidente de los comuneros, Juan García Corbalán, trasladó este problema a la presidenta de la Asamblea Regional, Rosa Peñalver, a quien explicó que en la zona se asientan pequeñas explotaciones agrícolas y ganaderas, fundamentalmente de cultivos leñosos.

La falta de agua está afectando gravemente a esas explotaciones, que se ubican en una decena de pedanías de Lorca con unos 6.000 habitantes, y señaló que para poner solución a esa situación sólo sería preciso recibir unos 600.000 metros cúbicos de agua procedentes del río Luchena «que no suponen competencia alguna para las grandes comunidades de regantes ni las grandes superficies».

Según indicaron estos regantes, algunos miembros de la comunidad han sacrificado sus almendros para que otros puedan dar de beber al ganado. Añadieron que, a pesar de que muchos de ellos se dedican al cultivo de hierbas aromáticas, que sólo precisan ser regadas tres veces al año, no disponen de agua ni siquiera para esos riegos.

Esta falta de recursos hídricos, lamentó García Corbalán, ha provocado un empobrecimiento de las explotaciones agrícolas y ganaderas que, a su vez, está fomentando que muchos de los propietarios emigren a otras zonas, con el consiguiente despoblamiento paulatino de las pedanías.

La presidenta de la Cámara se comprometió a gestionar su comparecerencia ante la Comisión Especial de Agua para exponer estos problemas a los diputados.