El secretario de Estado de Medio Ambiente, Pablo Saavedra, aseguró ayer que las obras de la tubería de casi 28 kilómetros que conducirá el agua desde la planta desaladadora de Águilas hasta las zonas regables del valle del Guadalentín estarán terminadas antes de fin de año.

Saavedra supervisó los trabajos, acompañado por la directora general del Agua del Ministerio de Agricultura, Liana Ardiles; el delegado del Gobierno en Murcia, Antonio Sánchez-Solís; la consejera de Agua, Adela Martínez-Cachá; el presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura, Miguel Ángel Ródenas; y el alcalde de Lorca, Francisco Jódar.

El Ministerio adjudicó en julio por 20 millones de euros esta obra que permitirá llevar agua desalada a los regadíos de Lorca y Totana, particularmente afectados por la sequía. Según Saavedra, para llevarla a cabo «ha habido que salvar no pocos obstáculos administrativos y físicos».

Estos trabajos forman parte de las obras de emergencia que está ejecutando el Ministerio al amparo del Real Decreto Ley 6/2015, de 14 de mayo aprobado por el Gobierno para combatir los efectos de la sequía en la demarcación hidrográfica del Segura. Además de la tubería, se construirán las impulsiones para que el agua transportada llegue a los distintos puntos de demanda, indicó Saavedra, recordando que para ello se ha habilitado una partida en los Presupuestos de 2016.