Tras más de un año de negociaciones y varios compromisos del presidente Mariano Rajoy ya hay acuerdo. Los 146.000 usuarios del trasvase Tajo-Segura y más de 200 empresas y cooperativas de la Región de Murcia se beneficiarán de la subvención del precio del agua desalinizada para su uso agrícola. El Gobierno central va a destinar 8 millones de euros para abaratar el coste de un total de 50 hm3, 30 procedentes de la planta de Torrevieja (Alicante), para los que se destinarán 6 millones; y los 20 restantes de la de Valdelentisco (Mazarrón), que recibirán una ayuda de dos millones de euros. Acuamed, organismo que depende del ministerio de Agricultura, gestiona ambas plantas.

El precio acordado es de 30 céntimos el metro cúbico para los usuarios del Trasvase, que supone casi la mitad de lo que cuesta actualmente; y, para el resto, una rebaja de 10 céntimos sobre los contratos ya firmados. Estará vigente hasta el 30 de septiembre de 2016, salvo que las condiciones meteorológicas cambien.

El convenio se selló ayer en Madrid entre el Gobierno regional, el ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, y los regantes murcianos, integrantes de la Mesa del Agua. Un «acuerdo histórico», en palabras del jefe del ejecutivo murciano, Pedro Antonio Sánchez, al ser la primera vez que se subvenciona el precio del agua desalada.

«Son medidas de carácter extraordinario ante una situación que es excepcional», dijo el presidente de la Comunidad,quien añadió que «ayudará a minimizar el impacto de la sequía en la Región mientras no se recuperen los embalses de cabecera del Tajo para autorizar nuevos trasvases».

Para el jefe del Ejecutivo murciano, «se garantiza el agua a agricultores y regantes y aporta más seguridad y más futuro, al permitir que puedan disponer de recursos complementarios y mantener 100.000 empleos en el sector». Un sector estratégico que supone el 5,3 por ciento del PIB regional (más del doble que la media nacional) y para mantener la capacidad exportadora (el 30% de las frutas y hortalizas de España).

Pese a todo, Sánchez dejó claro que «se trata de medidas provisionales que no pueden desviarnos de nuestro objetivo, que es la puesta en marcha del Pacto Nacional del Agua que resuelva de forma definitiva el problema del agua».

La ministra, Isabel García Tejerina, por suparte, destacó que el pacto permitirá que Murcia «que es ejemplar en el uso del agua, siga teniendo este recurso a su disposición, para generar riqueza para Murcia y para el conjunto de España».

En la reunión participaron, además de Sánchez, la ministra Isabel García Tejerina, la consejera de Agua, Agricultura y Medio Ambiente, Adela Martínez-Cachá; y, por parte de la Mesa del Agua, el presidente de la patronal Croem, José Mª Albarracín; y los presidentes del Sindicato de Regantes del Trasvase Tajo-Segura (SCRATS), José Manuel Claver; de Proexport, Juan Marín; de Fecoam, Santiago Martínez; y de Coag, Miguel Padilla.