La Comunidad destinará 4,7 millones de euros en ayudas a 111 grupos de investigación para proyectos de I+D hasta 2018, según informó ayer el presidente de la Comunidad, Pedro Antonio Sánchez, durante el acto de presentación de estas ayudas que forman parte del Programa de Apoyo a la Investigación de la Fundación Séneca, y que se realizó en el Palacio de San Esteban.
Estas ayudas beneficiarán a 832 investigadores pertenecientes a universidades y organismos públicos como la Universidad de Murcia, la Universidad Politécnica de Cartagena, la Universidad Católica San Antonio, el CEBAS-CSIC y los hospitales universitarios Virgen de la Arrixaca y Morales Meseguer.
Según explicó el jefe del Ejecutivo regional, «la financiación media de los proyectos se sitúa por encima del 85 por ciento de lo solicitado», y remarcó que «nunca antes la Comunidad, a través de la Fundación Séneca, había financiado un número tan elevado de proyectos en una convocatoria, y tampoco cuenta con precedentes la cifra destinada a este fin».
Las áreas de investigación abarcan materias como la educación, la salud, el medio ambiente o el patrimonio, y se trata de nuevas líneas que no se están desarrollando hasta el momento en las universidades y centros de investigación. Los 111 nuevos proyectos seleccionados y financiados se suman a otros 51 que ya hay en marcha.
De la economía a la educación
Estos proyectos van a permitir atender demandas y retos sociales, culturales y económicos que preocupan a los ciudadanos y que reclaman una respuesta desde la ciencia en temas como la economía, la agricultura y la alimentación, la educación, el medioambiente, el patrimonio cultural, las tecnologías de la información y las comunicaciones o la salud.
Así, por ejemplo, estos investigadores van a generar el mejor conocimiento en temas como la reducción de gases de efecto invernadero en cultivos ecológicos de nuestra Región, las tecnologías para mejora de los vinos, el desarrollo de herramientas biotecnológicas contra virus del tomate, la dieta mediterránea y su relación con la enfermedad de Alzheimer o también las terapias genéticas contra distintos tipos de tumores. También los relacionados con el uso de especies arbóreas autóctonas para la restauración ecológica en la Sierra de Cartagena-La Unión, técnicas para luchar contra los contaminantes que afectan a las rapaces en la Región, los sistemas de prevención y protección frente a avenidas en el Alto Guadalentín. A todos ellos se unen otros como la evaluación y mejora de las vocaciones científicas en alumnos de la ESO de la Región o las habilidades que influyen en el rendimiento escolar.
