La mejora en la recaudación de los tributos compartidos entre el Estado y la Comunidad Autónoma que alimentan la financiación autonómica no se traduciría en una mejora inmediata de los ingresos que Murcia recibe del Estado. Aunque el año 2015 se cierre con una aportación del IRPF, el IVA o los Impuestos Especiales muy superior a la que figura en los Presupuestos de la Comunidad y en las cuentas de la financiación autonómica, la Administración regional no vería la diferencia entre las cifras previstas y la ejecución real hasta dentro de dos años, según explicó el consejero de Hacienda y Administración Pública, Andrés Carrillo.

De igual forma que el ministerio de Hacienda ha liquidado ahora las cuentas de la Comunidad del año 2013 y ha encontrado un saldo a favor de Murcia de 255 millones, que la Administración regional ingresará en 2016, la desviación al alza que puede llegar a producirse en la recaudación de 2015 no se computará como dinero contante y sonante hasta 2017. No obstante, es la primera vez que cambia de signo el saldo de las cuentas con el Estado desde que se inició la crisis y arroja un balance positivo para Murcia. En años anteriores la Comunidad no llegaba a alcanzar los ingresos previstos y tenía que devolver al Estado el dinero recibido de más en los anticipos a cuenta que va ingresando.