­Los presidentes de Murcia y Valencia, Pedro Antonio Sánchez y Ximo Puig, respectivamente, mantendrán próximamente una reunión con el objetivo de hacer un frente común que frene las pretensiones de su homólogo castellano-manchego, Emiliano García Page, de acabar con el trasvase de agua del Tajo al Segura.

«El diálogo es la nueva política», manifestó ayer Puig, y abogó por «buscar aliados para lo que beneficia a todos los ciudadanos». Añadió que estaba «en contra de hacer banderías del agua», en relación al trasvase, y se mostró partidario de buscar «desde la máxima cohesión» soluciones en todos los territorios del Estado.

Desde Murcia, el presidente Sanchez también dejó claro que no iba a entrar en batallas. «Que nadie me busque en una ´guerra´ del agua porque la actitud de la Comunidad será la de un diálogo abierto, reivindicativo y exigente con el Estado para poner en marcha un gran pacto nacional del agua que establezca soluciones definitivas».

Sánchez, recordó que el trasvase Tajo-Segura «está blindado por una ley que aprobó el Congreso» y manifestó que «provocando no se resuelve, y en lugar de dedicar tiempo a tirarnos titulares, o declaraciones de provocación que lo único que hacen es poner a la gente nerviosa, hay que emplear este tiempo en trabajar y solucionar los problemas».

El presidente añadió que a esta Región «nadie nos puede dar lecciones de cómo se utiliza el agua o cómo se paga», recordando que los regantes «han pagado más de 400 millones por el trasvase, por un agua escasa y muy limitada».Y concluyó subrayando que en España «hay agua para todos».

Otros temas

Además del Trasvase, en la reunión entre los presidentes de Murcia y Valencia se abordarán otros temas que afectan a ambas autonomías, como el Corredor Mediterráneo, «que a ambos nos importa mucho» y la financiación autonómica. A juicio de Puig, Valencia y Murcia son las que «peor tratamiento» reciben por parte del Estado en financiación.

Contra amenazas externas

Por su parte, el Grupo Parlamentario Popular propondrá en la Asamblea Regional un pacto regional del agua con el resto de formaciones políticas (PSOE, Ciudadanos y Podemos) y sectores implicados. Así lo avanzó ayer el portavoz de este Grupo, Víctor Martínez, quien aseguró que el objetivo del mismo es «defenderse de las amenazas externas y como antesala a un pacto nacional del agua». El Grupo Popular ha pedido en la Asamblea que se constituya una Comisión Especial del Agua, de la que salgan propuestas concretas en materia de agua, donde se hable de trasvases y del precio social del agua desalada y que esté abierta a la sociedad.