Los contratos de formación aumentaron un 23,7% entre enero y junio de este año en relación al mismo periodo de 2014, hasta sumar 83.800, su nivel más alto en un primer semestre en los últimos seis años, según un informe de Randstad, en el que se destaca que este tipo de contratos acumulan ya tres años consecutivos de incrementos. En el caso concreto de la Región, crecieron un 14,7%.

El contrato de formación tiene por objetivo la cualificación profesional de los trabajadores mediante la alternancia de la actividad laboral con la formación para el empleo. La duración mínima de estos contratos es de seis meses y la máxima de dos años, salvo determinados convenios que permiten que alcance los tres años.

Desde el año 2012 esta modalidad de contratación ha incrementado su presencia en el mercado laboral español, hasta representar en el primer semestre el 0,98% del total.