La Guardia Civil ha desmantelado un criadero ilegal de animales en el municipio de Molina de Segura, en el que se encontraban hacinados 114 perros y 22 gatos en pésimas condiciones higiénico-sanitarias.
En el marco del 'Plan de protección de animales de compañía', la Guardia Civil ha desarrollado la operación 'Shar pei' que ha permitido descubrir las instalaciones, que carecían de las preceptivas autorizaciones para el desarrollo de tal actividad mercantil.
La Benemérita inició la investigación después de que la Policía Local de Molina de Segura informara de la existencia de un criadero de animales de compañía que, a priori, carecía de licencia de actividad municipal y declaración de núcleo zoológico.
Con esta información, la Benemérita desarrolló, en colaboración con los servicios veterinarios de la consejería de Agua, Agricultura y Medio Ambiente de la Comunidad Autónoma y del ayuntamiento de Molina de Segura, la inspección del establecimiento. Esta permitió constatar que el inmueble disponía de numerosas jaulas y casetas de obra sin ventilación en las que se hacinaban hasta nueve animales por habitáculo. Además, estos recintos carecían de luz natural, por lo que sus paredes aparecían enmohecidas por una supuesta ausencia de desinfección y limpieza adecuada de las heces y orines de los animales, según apuntaron fuentes de la Benemérita en un comunicado.
La Guardia Civil ha localizado a 114 perros de distintas razas -shar pei, husky siberiano, rottweiller y bulldog francés- y 22 gatos, cuya estancia resultaba inadecuada tanto por la ausencia de condiciones higiénico-sanitarias como por su inaptitud para la crianza y atención de las distintas especies y razas, pues cada una de las cuales requiere una serie de atenciones específicas.
La operación 'Shar pei' ha culminado con la confección de las correspondientes actas por infracción a la Ley 10/90, de 1 de febrero, de Protección y Defensa de Animales de Compañía y Ley 50/99, de 23 de diciembre, sobre la Tenencia de Animales Potencialmente Peligrosos.
Los presuntos infractores podrían enfrentarse a elevadas sanciones, al tratarse de infracciones graves según la normativa vigente.
