Luis Provencio, propietario de una finca en el paraje de Prado Mayor, en el Parque Regional de Sierra Espuña, ha denunciado ante la Fiscalía de Medio Ambiente de Murcia a un técnico de caza y a dos celadores de la Reserva Nacional de Caza, por matar a tiros a su perro Mamón.

Los hechos ocurrieron en octubre del pasado año cuando el perro fue abatido de cuatro disparos yendo en compañía de otros tres, también propiedad de Luis Provencio que se encontraba en las proximidades, persiguiendo a un grupo de arruís. El propietario interpuso en su día una denuncia ante la Dirección General de Medio Ambiente de la consejería de Agricultura por los hechos, al tratarse de funcionarios, pero fue archivada. Medio Ambiente respondió que tras investigar el caso no encontró ninguna irregularidad en la actuación de los agentes.