Los casos de fraude en la formación de los desempleados que se han detectado en Andalucía no podrían llegar a producirse en la Región, debido a los controles que realiza el Servicio de Empleo y Formación (SEF) sobre los cursos para parados y para los trabajadores en activo que se imparten en la Región. Lo asegura el consejero de Empleo y Formación, José Gabriel Ruiz, que hace unos días clausuraba una jornada sobre la calidad de la formación para el empleo, en la que participaron más de un centenar de centros, academias y corporaciones locales de la Región. José Gabriel Ruiz y el director general de Empleo y Formación, Alejandro Zamora, explicaron que los inspectores del SEF realizan visitas al inicio y al final de cada curso para verificar los datos de los alumnos, de los profesores y del centro, con el fin de asegurarse de que se corresponden con la información recogida en la documentación oficial y se cumplen todos los requisitos.

A estas dos inspecciones se suma «una inspección sorpresa», que se realiza de forma imprevista para comprobar que todo está en orden, que el curso se desarrolla con normalidad y que las aulas, los programas y las condiciones que ofrece el centro reúnen las garantías de calidad exigidas.

Ruiz y Zamora se mostraron convencidos de que la existencia de un triple control en la documentación y en todas las condiciones impide que lleguen a producirse fraudes como los detectados en Andalucía, donde ha habido numerosas detenciones y en otras comunidades autónomas, como Extremadura.

El secretario general de la CROEM, José Rosique, asegura que en el centro de formación de la patronal hay incluso «un despacho para los inspectores». Añadió que cuando acuden a realizar los controles «incluso se sientan en las aulas junto a los alumnos, hablan con ellos para saber lo que piensan y escuchan a los profesores para ver lo que explican. Es muy posible que los controles de Murcia sean los más rígidos de España». Dijo también que es imposible colar facturas de otros gastos, «porque todo está auditado y abonado a través de cuentas bancarias. No hay pagos en metálico».

La cantidad destinada este año a los cursos de formación rondará los 30 millones de euros, incluyendo los fondos de Garantía Juvenil, según explicó José Gabriel Ruiz. Precisó que esta cantidad incluye los recursos aportados por el Fondo Social Europeo, que la Comunidad cofinancia en un 20%.

En los cursos de formación impartidos este año participarán unos 25.000 alumnos, entre parados y trabajadores en activo que hacen cursos de reciclaje o se forman para adquirir nuevas habilidades en el puesto que desempeñan.