La concejal del ayuntamiento de Murcia que ocupará el puesto de Antonio Cerdá al frente de la consejería de Agricultura y Agua, Adela Martínez-Cachá, asegura que es una mujer "muy decidida" y no tiene miedo a "ningún reto". La futura consejera es consciente de que llega a un puesto especialmente sensible a los cambios, porque en este momento se enfrenta a una situación delicada como consecuencia de la sequía, con la vista puesta en el eterno Plan Hidrológico Nacional, que no acaba de llegar.

"Sé que es poco tiempo, pero me voy a emplear a fondo», aseguró anoche, tras recibir la propuesta del presidente regional, Alberto Garre. La aspiración de los agricultores es que no haya interinidad en la consejería y que el nuevo responsable esté al menos hasta las generales.

Desde que el pasado jueves se supo que Antonio Cerdá dejaba su cargo para evitar que la causa de Novo Carthago desembocara en una posible imputación del expresidente Ramón Luis Valcárcel se había especulado con la posibilidad de que fuese nombrado el alcalde de Molina de Segura, Eduardo Contreras. "Si pasa, pasa, y si no, nada", manifestó ayer. Contreras, que ya había dejado claro que "da la cara por Alberto Garre y lo voy a seguir haciendo porque es una referencia ética a seguir". Para él, Garre es el mejor candidato a la presidencia.