Los dentistas están observando con cierta preocupación cómo aumentan las caries en niños menores de tres años. Bollería, zumos de bote, galletas, chucherías... Todo suma y da forma a la que está considerada como la enfermedad crónica de mayor prevalencia en la infancia, la caries. Con menos de tres años, los niños ya tienen acceso a todos estos productos azucarados, pero, además, a todo ello se une el hecho de que muchos siguen tomando la leche con cacao o con azúcar en biberón. «Estamos volviendo a ver lo que llamamos la caries del biberón porque cuando el niño bebe en vaso, los azúcares pasan directamente, pero con el biberón, se quedan adheridos», explica Oscar Castro, presidente del colegio de Odontólogos de la Región de Murcia, que desaconseja completamente esta práctica en niños de estas edades por los perjuicios que tiene.

Calculan los profesionales que entre el 15 y el 17% de los niños menores de tres años tienen caries por esta y otras razones. La cifra puede subir algo en los dos años siguientes, e incluso hay estimaciones que hablan de un 36% de niños de menos de cinco años con caries.

Castro explica que la experiencia demuestra que la mayoría de los niños con problemas en la boca a edades tan tempranas son hijos de inmigrantes «que han conocido de pronto el mundo de las chucherías, pero que no tienen inculcadas las costumbres de higiene bucal». En la población en general una de las cuestiones que más influye es que por los horarios laborales de los padres los niños pasan cada vez más tiempo con los abuelos, que suelen consentir más cuando los pequeños piden golosinas. «En muchas ocasiones cuando unos padres traen a la consulta a unos niños y les preguntamos si los pequeños se lavan los dientes, algunos nos dicen que realmente no lo saben, porque no comen con ellos a diario», apunta Castro.

Plan regional

Una de las ventajas que tiene la Región de Murcia es que a partir de los seis años todos los niños están incluidos en un plan de salud bucodental que ha conseguido reducir mucho la prevalencia de caries y problemas dentales entre los niños. Lo grave seguramente es que «de todos los niños incluidos en este plan y que reciben cartas para acudir a las revisiones, el 40% no va al dentista, y eso es culpa de los padres», sentencia Castro.

Si ya cuesta que los padres lleven a los niños al dentista a partir de los seis años, mucho más que lo hagan antes de esa edad, explica el presidente del colegio de Odontólogos, que asegura que los menores de seis años solo van al dentista si ya hay un problema grave. «De ese pequeño porcentaje que viene a las consultas para tratar una caries, solo el 4% afirma que sus hijos se lavan los dientes diariamente», lamenta Castro, que reivindica la importancia de la prevención para que la salud bucodental de los niños sea la adecuada y es necesario acudir a los profesionales.

Eso sí, no a cualquiera. Oscar Castro avisa de que hay clínicas de las denominadas ´low cost´ que ofrecen tratamientos a los niños que no necesitan. Especialmente ortodoncia. «Hay que pedir una segunda opinión, porque en la Región el 18% de los tratamientos a niños son ortodoncias y no siempre necesarias», afirma el presidente de los dentistas.