El presidente de la Comunidad Autónoma, Alberto Garre, escuchó ayer de boca del jefe del Gobierno central, Mariano Rajoy, que el Ejecutivo de la nación no tiene intención de cambiar su política de estabilidad presupuestaria y que, por tanto, seguirá apretando las tuercas a las autonomías para que cumplan con los objetivos de control del déficit público.

Mariano Rajoy dejó claro así a los dirigentes territoriales del PP que asistieron a la reunión Comité Ejecutivo Nacional -entre ellos alcárcel, en calidad de presidente del PP regional y vicepresidente del Parlamento Europeo, y Garre, como jefe del Gobierno regional- que no está dispuesto a levantar la mano del control presupuestario pese a la cercanía de las elecciones municipaes y autonómicas del próximo mes de mayo de 2015.

La Región es una de las comunidades que más problemas ha tenido y tiene en los últimos años para el control de su déficit público, algo que el Gobierno regional achaca al sistema de financiación autonómica.

Con esta advertencia, Rajoy quiere evitar que los dirigentes regionales caigan en la tentación de aumentar las partidas de gasto para realizar obras de cara a la campaña electoral. «Construyendo carreteras no se ganan elecciones», señaló el presidente.