Joan Amorós, secretario general de Ferrmed, el 'lobby' que reclama la línea ferroviaria de Algeciras a Escandinavia, que conectará la Región con el norte de Europa, dijo ayer en Murcia que el Gobierno debería destinar 800 millones más al ferrocarril para evitar «los cuellos de botella» que a largo plazo se crearán al Corredor Mediterráneo y, especialmente, para su desarrollo en Murcia y Cartagena.

Amorós recordó dijo que «se sigue asignando a la Alta Velocidad el 70%» de la partida ferroviaria de los presupuestos y sólo el 8% para la línea convencional por la que transcurren las mercancías. «Faltan 800 millones que hemos de procurar que se asignen claramente», recalcó, ya que los 600 millones ya asignados, según dijo, sólo permiten «llegar a medio camino de Castellón y Valencia», pero se necesita más para que en 2016 llegue a la Región de Murcia.

Indicó que a final del año 2015 está previsto que llegue el Corredor a Valencia y avanzó que entonces se harán unas pruebas reales con asignación económica europea para demostrar que funciona y para ver los problemas y escollos que se producen. El secretario de Ferrmed reclamó que la asignación de «surcos ferroviarios» no la hagan las autoridades nacionales, sino la Unión Europea para lograr coordinar los tráficos de mercancías, tal y como Ferrmed ha reclamado a la Comisión Europea.

Actualmente, cuatro trenes viajan diariamente desde el sur de Francia hasta Luxemburgo con gran parte de mercancías españolas, fundamentalmente con remolques de camión que realizan por ferrocarril estos 1.050 kilómetros en cuatro horas y media a una media de 70 kilómetros la hora, con lo que una cabeza tractora los recoge en el destino para concluir el traslado al comprador en lo que se conoce como «autopistas ferroviarias».

Destacó la eficacia de este transporte, no sólo por el ahorro de una quinta parte del consumo de combustible que supone en comparación con el transporte por carretera, sino en mano de obra, dado que muchos camiones aguardan días en destino a la espera de algún porte para rentabilizar el regreso.

La previsión de Ferrmed es que en 2020-2025 el 15% de las mercancías agroalimentarias emplean el ferrocarril para la exportación a los países del norte de Europa y que en 2030-35 se alcance el 30%.