La Federación Regional de Empresarios del Metal de Murcia (Fremm) ofrece en el primer trimestre de este año 60 cursos de formación bonificada, que abarcan tanto la oferta en abierto como la diseñada a la carta conforme a las necesidades de las empresas demandantes. En total, se formarán unos 720 alumnos.

Fremm resalta la calidad y reconocimiento empresarial y social de su propuesta, que se realizará a través del sistema de bonificaciones de la Seguridad Social, además de asumir la tramitación de las ayudas para evitar el papeleo administrativo a las empresas colaboradoras.

La organización empresarial ha detectado "un incremento de petición de cursos a la carta por parte de las empresas, que acuden a Fremm atraídas por la calidad y nivel formativo, alcanzado cada año por su alumnado, así como de la cualificación de su profesorado, como fruto de sus más de 30 años impartiendo formación especializada en el metal a las empresas asociadas a sus gremios y asociaciones, al igual que de sectores afines".

Desde Fremm se recuerda que todas las empresas pueden acogerse a la formación bonificada, en donde las ayudas van desde una financiación del 100% para las empresas de 6 a 9 trabajadores, del 90% si tienen entre 10 y 49 empleados y del 60% si son más de 260; en los dos últimos casos, la sociedad debe aportar el 10% y el 40% mínimo de financiación privada.

Coincidiendo con el inicio formativo en este trimestre, la federación sectorial ha iniciado una campaña entre sus más de 3.000 empresas asociadas para que hagan un buen uso de los fondos destinados a la formación bonificada.

Mediante esta iniciativa, se anima a los empresarios a que huyan de ofertas que utilicen las ayudas de forma indebida, contraten entidades o empresas que cumplan los requisitos para impartir los cursos demandados y consulten sus dudas con el Departamento de Formación de Fremm.

En Fremm, se advierte a las empresas que desde la puesta en marcha de la formación bonificada en 2004 "se han detectado numerosos fraudes relacionados con la implantación de servicios de consultoría y asesoría simulando formación, al igual que se ofrecen regalos a cambio de la realización de un curso o la tramitación de cursos ficticios y reparto de los fondos, entre otras propuestas". Indicando que desde la Administración se plantea el establecimiento de controles telemáticos.