Los problemas económicos y el paro femenino derivados de la crisis se han convertido en aliados de la lactancia materna y cada vez son más las mujeres que optan por amamantar a sus hijos, ya sea por el alto precio de la leche artificial o porque al estar desempleadas disponen de más tiempo. Los que también regresan con la crisis son los pañales de tela, por los que muchas madres optan con el propósito de ahorrar unos euros.

Las matronas, como Consuelo Martínez Romero, subdirectora de Enfermería del hospital Materno Infantil Virgen de la Arrixaca de Murcia, creen que la crisis está motivando a algunas mujeres a seguir amamantando a sus hijos. «Ha sido como un pequeño empujoncito para que sigan dando el pecho, porque algunas dicen ´es que no me queda otra´», señaló Martínez, que, además, es vicepresidenta de la Federación de Asociaciones de Matronas de España (FAME).

Las matronas están utilizando este factor para convencer a las mujeres de los beneficios de este alimento. «Es el más económico. No está contaminado. Es el marketing que siempre hemos metido por los ojos y los oídos a las madres, pero ahora para muchísimas es una necesidad», apuntó.

Consuelo conoce algunos de estos casos, pero también otros €pocos, eso sí€ de mujeres que se han visto obligadas a volver al pañal de tela. «Conozco dos o tres casos que han vuelto al de tela porque se lava y los otros son carísimos», añadió esta matrona.

No obstante, Consuelo insiste en que el hecho de que en España se haya duplicado el número de madres que amamanta a sus hijos durante seis meses no es consecuencia directa de la crisis. Una de las asociaciones que lucha para que se apueste por esta alimentación es La liga de la leche, que promueve la lactancia a través de sus monitoras. Esta práctica es bastante habitual, ya que en 2008 en el hospital de la Arrixaca, que es el que realiza más partos junto con el de La Paz y el del Rocío en España, salían entre el 30 y el 40% de las madres con lactancia exclusiva y hasta un 50% si se añadían las que les daban también agua.